Great Ocean Road es una carretera de más de 240 kilómetros que parten desde la ciudad de Torquay, al este del país, hasta llegar a Warrnambool, al oeste. Esta carretera fue construida por soldados australianos como homenaje a militares y mujeres de la I Guerra Mundial. A lo largo de su recorrido se pueden contemplan las espectaculares cascadas, el Parque Nacional Great Otway o las espectaculares pilas de piedra caliza conocidas como los Doce Apóstoles Foto: Weyne Yew

El Parque Nacional Glacier, situado en Montana (USA), está dividido por una interminable carretera de más de 80 kilómetros que lo atraviesa de este a oeste. Este camino abarca todo lo ancho del parque, por lo que recorre todos los tipos de terreno de los que dispone: desde la tundra alpina movida por el viento, a los lagos glaciares o los bosques de cedros en los valles interiores. Un imprescindible para quienes visitan la zona. Foto: Hunter James

Una de las carreteras más majestuosas del mundo pero también una de las más peligrosas. Esta preciosa carretera desemboca directamente al Atlántico, tras un recorrido de ocho kilómetros y 114 curvas sinuosas y con unas vistas maravillosas. Foto: Sebastian Staines

La Avenida de las Hayas Oscuras es una imponente e intimidante carretera que se sitúa entre Armoy y Stranocum, en pleno condado de Antrim, en Irlanda del Norte. Decenas de hayas centenarias conforman un túnel atmosférico que, entre otras, ha sido utilizado en la serie de HBO Juego de Tronos, multiplicando su ya de por sí desmesurado valor turístico. Foto: Trevor Cole

Pocas cosas no son majestuosas en Hawai, pero tener una vía como Hana Highway que permite ver muchas de ellas sin bajar del coche, es un lujo. Desde bosques tropicales, al océano Pacífico, pasando por las espectaculares cascadas de Maui. Es una carretera que puedes recorrer un millón de veces y siempre descubres algo nuevo. Foto: Claudio Schwarz

Esta carretera, situada en Monterey County, California, está considerada una de las más pintorescas de Estados Unidos. La Autopista Uno recorre casi toda la costa de California, desde su punto de inicio al sur de Los Ángeles, hasta el condado de Mendocino en el norte. Ahora, el tramo más reconocible está en Monterey donde se pueden contemplar las interminables secuoyas, los espectaculares arcos del condado de Monterey, la escarpada costa de Big South, los espeluznantes acantilados o el reconocible puente Bixby Creek Foto: Daniel J. Schwarz

Los 232 km de extensión de Icefields Parkway es uno de los tesoros nacionales que Canadá luce con orgullo. Situado en Alberta, esta autovía se cuela en el corazón de las Montañas Rocosas de Canadá, además de recorrer impresionantes lagos, montañas vírgenes, glaciares antiguos y unos valles de fantasía. Además, pasa por los Parques Nacionales de Banff y Jasper. Un viaje de una belleza natural inigualable. Foto: Ryan Stone

El espectáculo de Jebel Hafeet Mountain Road es llegar al final de la misma y poder ver la puesta de sol sobre la montaña Jebel Hafeet. Rocoso, complicado y escarpado, no es un trayecto sencillo pero la recompensa merece mucho la pena. Foto: Nagendra Badiganti

El Lago Enol es un pequeño humedal que se forma en los Picos de Europa, en plena Cordillera Cantábrica. Situado junto al lago de la Ercina, juntos conforman los Lagos de Covadonga, en el Parque Nacional de los Picos de Europa. La CO-4, la carretera que atraviesa el Parque, permite disfrutar de la majestuosidad de todo el entorno Foto: Justen de Vasconcellos

El Valle de Fuego situado en Nevada recibe su nombre de las espectaculares piedras rde arena roja que, al contacto con el sol, parecen estar ardiendo. Conocida con anterioridad como la Ruta 40, esta autovía tiene 38 km de distancia, pasa por Las Vegas y requiere un pago de 10 dólares para acceder a ella.

Foto: Holden Baxter

Milford Road es una inolvidable y espectacular forma de llegar al estrecho de Milford Sound. Un viaje al corazón del Parque Nacional Fiordland y la indescriptible zona Te Wahipounamu. A lo largo de esta carretera veremos el Valle Eglinton, que hace millones de años estuvo lleno de hielo de glaciar. También pasaremos por los Lagos Mirror, las Montañas Earl y la Avenida de la Montaña que Desaparece, donde una ilusión óptica hará que la montaña empequeñezca según te acercas.

Fotos: Chaz McGregor

North Yungas Road es una de esas carreteras que combina la belleza del paisaje con el miedo a despeñarse por una ladera. No en vano, se conoce como el Camino de la Muerte a los 80 km que unen la ciudad de La Paz y la región de Los Yungas. Se estima que mueren 96 personas al año, en los 209 accidentes anuales que se registran.

Fotos: Henrique Sa

La Autopista Overseas Highway permite a quienes la cogen conducir, durante los 181 kilómetros de extensión que tiene, conducir por encima del océano. Todo para unir Miami con los Cayos de Florida. A lo largo del viaje se puede ver ambiente de sabana tropical, arrecifes coralinos maravillosos, incluso decenas de cocodrilos pendiente de turistas despistados.

The Quiraing es una carretera sinuosa y estimulante que ofrece uno de los paisajes más espectaculares de Escocia. Situada en Portree, esta carretera se creó en la zona que dejó un deslizamiento de tierra masivo en la península de Trotternish, donde también se crearon acantilados, mesetas ocultas y pináculos en la roca.

Foto: George Hiles

La Ruta 1 de Islandia es la única carretera de circunvalación que recorre el país, regalando paisajes absolutamente embriagadores. La Ruta 1 parte de la capital Reykjavik y a través de sus 1339 kilómetros pasa por fiordos, montañas, pueblos de pescadores y zonas nevadas por completo. Ahora, cabe reseñar varios puntos imprescindibles: la gloriosa cascada Seljalandsfoss, el precioso lago Myvath y la laguna Jökulsarlón

Foto: Gemma Evans

La Carretera Atlántica de Noruega tiene apenas 8 kilómetros de largo, uniendo las aldeas de Vevang y Karvag a través de un hermoso archipiélago y ocho puentes bajos. Entre todos ellos, destaca el piente Storseisundet, el más alto de todos y el más espectacular pues, desde determinados ángulos, parece caer directo al mar.

Foto: Jeff

La carretera de montaña Tianmen se abre paso a través de la ladera de la montaña Tianmenshan en China. Son poco más de 9 kilómetros, pero sus 99 curvas son infinitas y se eleva hasta 1,279 metros por encima del valle. Por eso la conocen como la Avenida que une el cielo, pues termina en la Cueva de Tianmen (Puerta al Cielo), un arco de roca natural cortado en la montaña y al que se accede, tan sólo, subiendo 999 escalones

Transfagarasana es la carretera de montaña más impresionante del mundo. Se trata de un cúmulo de curvas, giros y vueltas salpicada con túneles de hasta 800 metros que convierten cada paso por allí, en una aventura, con Dráculo de testigo cercano. La carretera une Cartisoara con el Pico Moldoveanu, el más alto de Rumanía, por lo que llega a ascender más de 2.000 metros.

Foto: Umit Yildrim

Conocida como la Escalera Troll, esta carretera sinuosa y curvada parece hecha para reírse de los conductores. Nada más lejos de la realidad. La vía conecta Andalsnes con Valladal y es una de las zonas más visitadas del país. Fue construida en 1936, costó ocho años terminarla y, entre otros paisajes, permite ves la cascada Stigfossen que vierte sobre montañas verdes y grava.

Es la carretera que todo el mundo ha visto millones de veces en cine. Es una de las vías más emblemáticas de Estados Unidos, aunque su longitud es de tan sólo 8 km, en los que atraviesa el desierto de rocas rojas, las agujas del país Navajo de Utah y Arizona, el río San Juan y acaba por desembocar en la ciudad de Bluff

La carretera de Iroha-Zaka es la vía más conocida y reconocible de la Montaña Nikko. Se trata de una carretera que une la ciudades de Nikko y Okunikko y está compuesta por 48 curvas. Una cifra que no es casual, pues es una curva por cada letra del alfabeto japonés antiguo

La Carretera 12 o Un viaje a través del tiempo, es una carretera estatal que se encuentra entre los el condado de Garfield y de Wayne en Utah. A través de sus 197 km, quienes la recorran de principio a fin pasarán por el Bosque Nacional Dixie, donde está el reconocible Red Canyon, y el Parque Nacional Bryce Canyon, además de pueblos como Tropic, Cannonville o Henrieville.