Un nuevo frente amenaza la geopolítica mundial: tensión entre Corea del Norte y Corea del Sur
Un nuevo frente de tensión crece en el mundo. Si bien se trata de una relación precaria desde hace tiempo, las señales que llegan en los últimos días desde Corea no son esperanzadoras.
La relación entre Corea del Norte y Corea del Sur se ha enfriado aún más, si es posible, en las últimas semanas. Recientemente, de hecho, Corea del Sur encontró en las calles de varias provincias y de Seúl los restos de centenares de globos cargados de basura, procedentes del norte.
En los globos, había de todo: botellas de plástico, pilas, colillas, trozos de zapatos, trapos y estiércol.
El lanzamiento de estos globos no fue baladí. De hecho, ha sido la respuesta de Pyongyang al lanzamiento de propaganda contra Corea del Norte, por parte de organizaciones humanitarias y disidentes norcoreanos reubicados en el sur del país.
Pero, más allá de la propaganda, Corea del Sur también lanzaba globos con comida, medicamentos, USB que contienen música y series de televisión prohibidas en el norte, tal y como cuenta el periódico italiano Il Post.
En 2020, el Gobierno progresista de Corea del Sur prohibió el envío de este tipo de propaganda para calmar las tensiones entre los dos países y garantizar la seguridad de los ciudadanos que viven cerca de la frontera. Sin embargo, la Corte Constitucional tumbó la normativa el año pasado al declararla inconstitucional, ya que restringía la libertad de expresión, tal y como explica El País.
No es la primera vez que ocurre algo así: de hecho, en los últimos meses Corea del Norte ha lanzado proyectiles de artillería y ha realizado pruebas con misiles balísticos pese a la prohibición de la ONU.
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El líder norcoreano Kim Jong-Un supervisó estas pruebas. Además, no es una novedad que el país esté desarrollando un programa nuclear considerado ilegal por la ONU.
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Ante esta reacción, el ejecutivo de Corea del Sur aseguró que iba a haber represalias. En primer lugar, reanudó los mensajes de propaganda con altavoces hacia Corea del Norte. El último se había emitido en 2018, pero, tras una cumbre entre los dos países, se suspendieron como símbolo de la voluntad de distender las relaciones.
Sin embargo, tras seis años de pausa se han retomado y, tal y como explica la CNN citando al Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur, en estas emisiones se informan a los norcoreanos de la "realidad de Corea del Norte", en contraposición al desarrollo del Sur y de su cultura.
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Pero hay otra propuesta más dura, la del Consejo de Seguridad Nacional de Corea del Sur, que anunció la intención de presentar de una moción al gobierno que prevea la suspensión de un acuerdo de paz firmado en 2018 con Corea del Norte, como recuerda Il Post.
Este acuerdo preveía la interrupción de ejercicios militares en la frontera entre los dos estados, uno de los confines más militarizados del mundo.
Otra señal del enfriamiento de las relaciones se nota en la decisión de Pyongyang de demoler parte de la línea ferroviaria que conecta la costa este de las dos Coreas, tal y como relata DW.
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Las tensiones entre los dos estados no son recientes. Están divididos desde el fin de la Segunda Guerra Mundial: el norte siempre ha sido gobernado por un régimen comunista represivo, mientras el sur se convirtió en una democracia liberal en las últimas décadas del siglo pasado.
Entre 1950 y 1953 se luchó la guerra de Corea, una de las fases más graves de la Guerra Fría. El conflicto, que causó entre 4 y 6 millones de muertes civiles y militares, se acabó con la firma de un armisticio, en el que se establecieron las fronteras locales. Sin embargo, ha dejado muchas cuestiones sin resolver, como las disputas territoriales, que no han permitido llegar a un acuerdo de paz.
A lo largo de la última década ha habido momentos de acercamientos y distanciamiento, pero ahora la relación es especialmente tensa, no solo desde que Kim Jong Un llegó al poder en 2012.
De hecho, el presidente surcoreano Yoon Suk-yeol, un político conservador que ha llegado al poder en 2022, también es muy intransigente. Por ahora, para las dos Coreas la paz sigue siendo un objetivo inalcanzable.