Grave acusación de Ucrania tras un duro golpe de Rusia en el campo de batalla
El ejército de Rusia habría usado armas químicas durante una nueva ofensiva para capturar un pueblo del Óblast de Donetsk, según un oficial ucraniano.
La localidad de Ocherétine está siendo una de las ciudades más disputadas por los rusos desde la caída de Avdiivka y el ejército de Moscú ha estado atacando la zona con todas las armas que tienen, incluyendo también armas químicas.
Nazar Voloshyn es el portavoz de las fuerzas ucranianas de Khortytsia, el grupo que opera en la zona, y explicó que el 23 de abril Rusia habría utilizado de todo para poder tomar Ocherétine.
Imagen: Telegram @Khortytsky_wind
Voloshyn explicó que "la situación en la zona del asentamiento de Ocherétine en la región de Donetsk es complicada", según citaba Ukrinform, que sacó las declaraciones de Voloshyn de uno de sus posts de Telegram.
"En su intento por capturar el asentamiento, el enemigo está usando todo su arsenal de armas disponible contra nuestras unidades, incluyendo venenos químicos, y está intentando ganar terreno por la parte más sur de Ocherétine", añadía Voloshyn.
Voloshyn también reveló que la mayor parte de Ocherétine ya estaba bajo el control de las fuerzas rusas y añadió que la parte sur de la localidad se encontraba bajo fuego de control de artillería lanzado por las Fuerzas Armadas de Ucrania.
Se estaban tomando medidas para estabilizar la situación en Ocherétine, según señaló Voloshyn, pero los informes que comenzaron a salir el 24 de abril sugieren que el pueblo habría caído ya en manos de Rusia, sobre todo, si nos basamos en las imágenes que han publicado los blogueros militares prorrusos.
The Guardian informó de que en estos blogs militares se habían hecho públicos vídeos en los que se veía una bandera rusa hondeando sobre Ocherétine. De ser cierto, la caída de Ocherétine sería un golpe muy duro para las fuerzas ucranianas de la zona.
Imagen: Telegram @rsotmdivision
"La captura de Ocherétine significaría que Rusia ha conseguido superar el flanco norte de la recién construida línea de defensa de Ucrania, en la que se incluían campos de minas y trincheras", según informaban Luke Harding y Dan Sabbage de The Guardian.
Imagen: X @War_Mapper
"La localidad, que una vez fue el hogar de 3.000 ciudadanos y de un centro ferroviario local, se sitúa en una intersección de la red de defensas", añadían Harding y Sabbage. Si las noticias que llegan de la zona son ciertas, la captura de Ocherétine colocaría al ejército ruso a solo 30 km (18,5 millas) de Pokrovsk.
Pokrovsk es importante porque se trata del cuartel principal de Ucrania en la región, uno que Kiev utiliza para hacer las rotaciones de sus tropas y de su equipamiento. Harding y Sabbage indicaron que este podría ser el próximo objetivo de las operaciones de Rusia.
The Kyiv Independent informó de que Voloshyn no había especificado qué tipo de armas químicas habían sido utilizadas contra el ejército ucraniano en Ocherétine, pero añadía que "cientos de casos de usos de granadas de gases asfixiantes y lacrimógenos" habían sido registrados desde que comenzara la invasión.
Imagen: Facebook @GeneralStaff.ua
En marzo de 2024, el comandante de las Fuerzas de Apoyo del ejército de Ucrania informó de que se habían registrado unos 1.068 casos de irritantes químicos equipados con químicos venenosos, según señalaba Militarnyi.
"Los rusos están aumentando el uso de municiones con sustancias venenosas. En total, durante la semana pasada, las granadas con sustancias venenosas han sido lanzadas desde drones al menos en 50 ocasiones", explicaba el portavoz del grupo operacional- estratégico de Tavria, el capitán Dmytro Lykhoviy, según Militarnyi.
Imagen: Wiki Commons / Mil.gov.ua, CC BY 4.0
"Cuando el enemigo no puede tomar nuestras trincheras con los ataques clásicos de artillería, o lanzarlos desde un dron, utiliza gas lacrimógeno", explicaba el capitán Lykhoviy. Los ataques forman ya parte de una tendencia creciente en la que el ejército ruso está utilizando químicos que están prohibidos en la guerra.
The Kyiv Post señaló que los gases de control o lacrimógenos están clasificados como armas del campo de batalla y están prohibidos en la guerra, de acuerdo con el Protocolo de Ginebra de 1925.
Imagen: Wiki Commons / Mil.gov.ua, CC BY 4.0