El radical cambio de vida de Katherine Heigl: de Hollywood a vivir en un rancho y adoptar a dos niños
A Katherine Heigl todo el mundo la recuerda por su papel de Izzie Stevens en ‘Anatomía de Grey’ (‘Grey's Anatomy’ / ‘Anatomía según Grey’), un trabajo que le valió el premio Emmy como mejor actriz de reparto en una serie dramática de 2007. Su carrera, desde entonces, no ha tenido un momento de pausa, aunque sí ha dado un cambio radical a su vida…
A Heigl la hemos podido seguir viendo en numerosas series y películas durante estos últimos años, aunque, desde luego, de menor relevancia que aquel papel con el que saltó a la fama mundial.
Fueron nada menos que 120 episodios y siete temporadas -entre 2005 y 2010- los que la actriz estadounidense apareció en el mítico drama médico creado por Shonda Rhimes, interpretando a una doctora buena y compasiva, que se envuelve emocionalmente con sus pacientes hasta el punto de llegar a romper las reglas por ellos.
En aquellos años, también apareció en otros de sus trabajos más recordados, como ‘Lío embarazoso’ (‘Knocked Up’ / ‘Ligeramente embarazada’, 2007), de Judd Apatow; o ‘La cruda realidad’ (‘The Ugly Truth’ / ‘La cruda verdad’, 2009), junto a Gerard Butler.
Y fue también durante aquellos años cuando la actriz se casó (en 2007) con el que hasta entonces era su pareja, el cantante y compositor de country Josh Kelley, con quien decidió crear una familia y cambiar su vida…
Heigl, además del sueño de ser actriz, que ya había cumplido, tenía otro, el de ser madre, pero también el de formar una familia como en la que ella vivió durante su infancia y su juventud, tal y como cuenta la web Bright Side.
¿Y a qué se refería con esto? Pues que la actriz de ‘Anatomía de Grey’ quería adoptar, una condición indispensable para dar forma a la familia que quería crear junto a Josh Kelley y algo con lo que el propio cantante estuvo de acuerdo desde que se puso sobre la mesa.
Esta condición estaba muy relacionada con las propias vivencias personales de Katherine Heigl. Y es que ella misma nació en el seno de una familia en el que su hermana mayor, Meg, había sido adoptada por sus padres, Paul Heigl y Nancy Engelhardt, en Corea del Sur.
Dicho y hecho. En 2009, dos años después de casarse, la pareja adoptó a su primera hija, Naleigh, quien, curiosamente, tenía la misma procedencia que su tía, Corea del Sur, y a la que incorporaron a la familia cuando tenía solo 9 meses.
La experiencia fue tan satisfactoria para Heigl y Kelley decidieron repetir aquello con una segunda adopción, la de la pequeña Adalaide, que llegó a sus vidas nada más venir al mundo en el estado de Luisiana, en Estados Unidos.
"Nací en esto y quería que mi familia se pareciera a la de donde yo vengo", publicó la actriz en redes sociales en referencia a sus adopciones.
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Pero como no hay dos sin tres, la actriz y el cantante acabarían teniendo un tercer hijo, este sí de forma natural. Joshua Bishop Kelley Jr. nació el 20 de diciembre de 2016, cinco años después de la adopción de Adalaide.
En una entrevista en la revista People, Heigl habló sobre el gran desafío que supuso durante aquellos años buscar el equilibrio entre su carrera y la maternidad: “Terminé teniendo un ataque de ansiedad total y me tiré de espaldas dos veces debido al estrés. La gente te dirá lo difícil que es, pero no tienes idea hasta que lo experimentas”.
“A menudo llegaba a casa enojada y frustrada por haberme perdido todo con mi hijo ese día. Sentí que todas mis prioridades estaban arruinadas”, añadía la actriz recordando los momentos tranquilos en los que podía quedarse en casa con ellos.
Fue por ello que, junto a su esposo, decidió dar otro gran paso en su vida, abandonar Los Ángeles y el bullicio de Hollywood para mudarse a un rancho a las afueras de Utah, en busca de una vida más sencilla y cercana a sus seres queridos. "No sabía cómo criar a mis hijos en Los Ángeles", dijo en Fox News.
En esa nueva vida, la actriz participa más en la vida de sus hijos y de sus amigos, haciendo actividades con ellos, mientras la pareja disfruta de la paz que ofrece el campo, “rodeados de 8 perros, 3 gatos, gallinas, cabras y caballos”, como ella misma confesaba.
Pero no solo ellos disfrutan del cambio, también sus hijos. “Adalaide, Joshua y Naleigh disfrutan pasar tiempo junto al río, arrojar piedras y alimentar a las gallinas”, destacaba la actriz a la vez que recordaba en Fox News que ahora se lo toma con más calma a la hora de leer los guiones que llegan a sus manos.
"Mi manager, mi agente, mi abogado, todos me dicen: 'Oye, probablemente deberías leer el guion que te enviamos hace dos semanas...’ (…) Estoy como, 'Bien, bien, bien, bien...' Simplemente me concentro en el mundo en el que estoy ahora", añadía.
Y es que, recuerda, "Estaba dedicando mucho tiempo y energía sólo a mi trabajo, pero me criaron pensando que la familia es lo primero", agregando que ella y Kelley "tenían grandes sueños de ampliar nuestra familia, mudarnos a las montañas y tener una vida más tranquila".
Pese a esa nueva vida que lleva años disfrutando, a Heigl la hemos podido ver en los últimos años en algunas películas como ‘La boda de Jenny’ (‘Jenny's Wedding’, 2015); ‘Unforgettable (Amor, celos, locura)’ (‘Unforgettable’, 2017); o el thriller de Castille Landon ‘Fear of Rain’ (2021).
Pero la hemos visto, sobre todo, en la televisión, con sus trabajos en series como ‘Asuntos de estado’ (‘State of Affairs’, 2014-2015), donde hacía el papel de Charleston Tucker; ‘Doubt’ (2017), donde era Sadie Ellis; ‘Suits (La clave del éxito)’ (‘Suits’, 2018-2019) –en la imagen-, como Samantha Wheeler; y ‘Firefly Lane’ (‘El baile de las luciérnagas’, 2021-2023), donde interpreta a Tully Hart.
Incluso con nuevos proyectos en marcha de cara al futuro, hoy, Katherine Heigl vive su vida y su carrera de otra manera, más centrada en su familia y en disfrutar de todo lo que la rodea, mientras no deja de lado lo que mejor sabe hacer: actuar y hacer disfrutar a todos sus seguidores.
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