Jim Carrey: la triste vida de un genio del humor

Una vida con dos caras
Orígenes humildes
Vivió en una caravana
Sacó su faceta más cómica para animar a su madre
En busca del sueño de Hollywood
El cheque falso de diez millones de dólares
Un duro camino hacia el éxito
Ace Ventura: el gran salto en su carrera
Un año muy productivo
Lluvia de papeles
El actor mejor pagado
No solo era un buen actor de comedia
Sumando Globos de Oro
Humor y más humor
‘¡Olvídate de mí!’: el gran papel de su vida
Más películas de su filmografía
Ivo Robotnik: su último y recurrente personaje
Una vida personal complicada
Trastorno bipolar y depresión
La vida amorosa de Jim Carrey
La muerte de Cathriona White
La terrible carta de Cathriona a Jim Carrey
Demandas contra Jim Carrey
En su defensa y la de su amada Cat
Descenso a los infiernos
Una imagen preocupante
Contra la corporaciones
El regreso del genio
Jim Carrey se retira
Una vida tranquila que no quiere cambiar
Se va, pero... ¿volverá?
Una vida con dos caras

A las puertas de su despedida como actor y convertido en uno de los iconos de la comedia en Hollywood, Jim Carrey llegó a ser uno de los interpretes más cotizados y mejor pagados del mundo, pero sus éxitos fueron de la mano de una vida personal menos alegre de lo que nos podría parecer y que ha afectado de lleno a sus últimos años de carrera. Esta es la triste vida de un genio del humor…

Orígenes humildes

Jim Carrey nació en Newmarket, un suburbio de Ontario (Canadá), en el seno de una familia trabajadora y católica. Era el pequeño de cuatro hermanos dentro de esa familia que formaron Kathleen Oram, una madre que era ama de casa, y Percy Carrey, un padre contable y aficionado a la música.

Vivió en una caravana

La demostración más clara de sus orígenes humildes fue que llegó a vivir junto al resto de su familia en una caravana después de que su padre perdiera el trabajo y él dejara la escuela con solo 15 años para trabajar como conserje. “Si mi carrera artística no hubiera cuajado, ahora probablemente estaría en Hamilton (Ontario) trabajando en la fundición de Dofasco” dijo en una entrevista a Hamilton Spectator en 2007. Y es que en aquella época vivía frente a las grandes fundiciones de la ciudad y pensaba que allí era donde estaban "los grandes trabajos”.

Sacó su faceta más cómica para animar a su madre

La situación con su madre tampoco hizo que su infancia fuera fácil, pero le dio alas para sacar a relucir su personalidad de cómico. “Mi madre solo estaba en la cama y tomaba muchas pastillas, así que yo solía entrar en su habitación para hacer imitaciones y cosas raras. Saltaba por las paredes y me tiraba por las escaleras para hacerla sentir mejor”, dijo en una entrevista a Howard Stern en 2004.

En busca del sueño de Hollywood

Sin embargo, Carrey, animado por unos primeros trabajos como humorista en Canadá en un cabaret y en el en el club Yuk Yuk´s de Toronto, decidió dar un vuelco a su vida y en el año 1983, con 21 años, se trasladó a Los Ángeles con la intención de convertirse en una estrella de Hollywood. Un sueño complicado que acabaría alargándose más de una década, pero que terminaría por hacerse realidad…

El cheque falso de diez millones de dólares

En una entrevista con Oprah Winfrey, Carrey confesó que emitió un cheque falso por valor de 10 millones de dólares que llevaba siempre en el bolsillo para huir de su duro pasado, darle esperanzas y motivarle de que un día lo podría cobrar en la realidad gracias a su trabajo como actor. “Me hizo sentir bien visualizar el futuro”, le dijo a la presentadora.

Un duro camino hacia el éxito

Sus primeros años en la meca del cine le llevaron a trabajar en el club The Comedy Store y a hacer varias audiciones en las que no tuvo éxito (‘Saturday Night Live’, ‘Los locos del taxi’), hasta que consiguió su primer papel importante como actor en la miniserie de la NBC ‘The Duck Factory’ (1984), en la que hacía de Saltan Tarkenton, un joven productor de animación.

Ace Ventura: el gran salto en su carrera

Desde entonces, Jim Carrey siguió haciendo pequeños papeles hasta que, por fin, Hollywood le dio su gran oportunidad. Fue en 1994 y de la mano de uno de sus papeles más míticos, el de Ace Ventura, que, si bien en su momento fue muy criticado por su interpretación, esas críticas se diluyeron entre el éxito de un personaje que se convirtió en un icono y que convirtió al actor en una superestrella de Hollywood.

Un año muy productivo

Ese año fue el de la gran explosión del genio del humor, porque, además de ‘Ace Ventura’, Jim Carrey estrenaría otros dos de sus grandes títulos cómicos: ‘La máscara’ y ‘Dos tontos muy tontos’.

Lluvia de papeles

A partir de entonces empezaron a llover los papeles para Jim Carrey. Solo un año después, en 1995, se convertiría en Enigma, para ponerle las cosas difíciles junto a Tommy Lee Jones al hombre murciélago en ‘Batman Forever’ y se volvería a poner esa ridícula camisa de colores para interpretar al detective de mascotas Ace Ventura en ‘Operación África’.

El actor mejor pagado

En 1996, Jim Carrey pasaría de ser el cómico de moda al actor mejor pagado de Hollywood. Fue con la película ‘Un loco a domicilio’, dirigida por Ben Stiller y coprotagonizada junto a Matthew Broderick, por la que el actor se embolsó nada menos que 20 millones de dólares, una cantidad que pretendían recaudar en el primer fin de semana del estreno de la película solo por contar con él para el papel protagonista.

No solo era un buen actor de comedia

Otro de los grandes momentos de la carrera cinematográfica de Jim Carrey llegaría en 1998, momento en el que cambió por completo el tipo de personaje al que nos tenía acostumbrado para hacer un papel mucho más serio en ‘El show de Truman’. Una interpretación excelente por la que ganó el Globo de Oro al mejor actor dramático, pero que, sin embargo, no le sirvió para ser ni siquiera nominado a los Oscar.

Sumando Globos de Oro

Su segundo asalto -fallido- al premio Oscar fue en 1999 interpretando al cómico Andy Kaufman en ‘Man on the Moon’, por el que de nuevo se llevó un Globo de Oro, esta vez al mejor actor de comedia o musical.

Humor y más humor

Con el inicio del nuevo siglo, Carrey volvería a la comedia más desternillante, con títulos como ‘Yo, yo mismo e Irene’ (2000) o ‘Como Dios’ (2003), esta última la segunda comedia más taquillera de todos los tiempos por aquel entonces.

‘¡Olvídate de mí!’: el gran papel de su vida

Pero el gran papel de su vida según la crítica vendría de la mano de ‘¡Olvídate de mí!’, de nuevo cambiando de registro y haciendo una excepcional interpretación junto a Kate Winslet. Muchos pensaron que podía haber sido su gran oportunidad en los Oscar. La cinta ganó la estatuilla al mejor guion original y su compañera de reparto a la mejor actriz, pero Carrey, una vez más, ni siquiera fue nominado…

Más películas de su filmografía

Desde entonces le hemos visto en películas como ‘Una serie de catastróficas desdichas de Lemony Snicket’ (2004), haciendo del Conde Olaf; en la película de suspense ‘El número 23’ (2007); o ‘¡Te quiero!’ (2009), junto a Ewan McGregor, para seguir haciendo películas de comedia a la baja en los siguientes años, por lo que hemos ido viéndole cada vez menos a pesar de no haber parado de trabajar.

Ivo Robotnik: su último y recurrente personaje

En 2020 se convirtió en el doctor Ivo Robotnik, el gran villano de la adaptación al cine del videojuego ‘Sonic the Hedgehog’, el mismo papel con el que podemos verle en ‘Sonic 2’.

Una vida personal complicada

Pero detrás de todo esto está una vida privada llena de malos momentos que le han afectado en lo profesional. Depresiones y problemas amorosos que influyeron, sobre todo, en esa época en la que, cuando se encontraba en lo más alto, empezó a ir diluyéndose y apareciendo con un aspecto desmejorado que sembró la preocupación entre sus fans.

Trastorno bipolar y depresión

Mientras su carrera comenzaba a brillar, fue diagnosticado con trastorno bipolar y, en el año 2004 habló sobre sus problemas de depresión, una enfermedad que le acompañó gran parte de su vida, en una entrevista en el programa '60 Minutes'.

La vida amorosa de Jim Carrey

Tuvo varias relaciones. Estuvo casado dos veces -con Melissa Womer (1987-1995) y con Lauren Holly (1996)- y tras estos matrimonios tuvo varias relaciones con Renée Zellweger (1999-2000), la modelo Jenny McCarthy (2005-2010) o la maquilladora Cathriona White (con quien tuvo una relación intermitente entre 2012 y 2015 a pesar de estar casada con Mark Burton).

La muerte de Cathriona White

El peor momento de su vida personal llegaría precisamente de la mano de su relación con Cathriona White, que se quitó la vida en 2015, falleciendo cuatro días después de romper con ella a causa de una sobredosis de fármacos, según su autopsia. En una carta que dejó atribuyó aquello a Jim Carrey, dirigiéndose a él de forma contundente: “He pasado ya tres días sin creerme que no estés aquí”.

La terrible carta de Cathriona a Jim Carrey

"Puedo seguir adelante con el corazón roto y poner todas las piezas juntas de nuevo. Podría, solo que esta vez no tengo la fuerza de voluntad", añadía Cathriona White en su carta de despedida dirigiéndose a Carrey.

Demandas contra Jim Carrey

Al año siguiente de aquello, Jim Carrey fue demandado, primero por el marido de White, Mark Burton, y después por su madre, Brigid Sweetman. El primero lo acusaba de haberle facilitado las sustancias que le ocasionaron la muerte y la segunda por negligencia del actor y por no informarla de que tenía varias enfermedades de transmisión sexual -hepatitis A, herpes y clamidia-. Ambas denuncias no prosperaron.

En su defensa y la de su amada Cat

"No toleraré este intento desalmado de explotarme a mí o a la mujer que amé. Los problemas de Cat nacieron mucho antes de que la conociera y, tristemente, su trágico final estaba fuera del control de cualquiera", dijo Carrey ante la denuncia de Burton.

Descenso a los infiernos

Aquella terrible situación hizo mella en el actor, que se hundió aún más en esa depresión que arrastró a lo largo de buena parte de su vida y que le hizo alejarse de la vida pública. Su imagen quedó dañada por aquellos supuestos escándalos y su carrera sufrió un importante parón. Una verdadera serie de catastróficas desdichas para Jim Carrey.

Una imagen preocupante

La imagen de Jim Carrey por aquel entonces no invitaba al optimismo. Aparecía con un aspecto muy descuidado y hacía declaraciones extrañas y preocupantes en las que decía cosas como “no importamos, esa es la buena noticia” o “no somos nada, no existimos”.

Contra la corporaciones

Lejos de rumores y especulaciones, el propio actor aseguró que alejarse de todo fue una decisión suya, cansado de que “las corporaciones manejen a su gusto ciertos temas decisivos”, dijo.

El regreso del genio

Fue Michael Grondy, el director que dio la oportunidad de hacer el gran éxito de su carrera –‘¡Olvídate de mí!’- quien le “rescató” en 2018 para darle el papel protagonista en su serie ‘Kidding’. Su interpretación en ella le devolvió el favor de la crítica y una vuelta a una felicidad que parecía perdida.

Jim Carrey se retira

En 2022, en el momento en el que estrena la segunda parte de ‘Sonic. La película’, Jim Carrey anuncia que abandona, que deja el cine. “Me voy a retirar. Estoy siendo bastante serio”, comentó en unas declaraciones a Acces Hollywood.

Una vida tranquila que no quiere cambiar

En esa misma entrevista destacó la vida tranquila que tiene actualmente, algo que no tiene mucha intención de que cambie: “Me gusta mucho mi vida tranquila, me encanta pintar en mis lienzos, me encanta mi vida espiritual y creo que ya he tenido suficiente. He hecho lo suficiente”.

Se va, pero... ¿volverá?

Eso sí, ha seguido abriendo la posibilidad de que esa decisión no sea algo definitivo: “Si el cielo me trae algún tipo de guion escrito en tinta dorada, y que me diga que va a ser importante para que la gente la vea, puede que lo haga. Puede que siga entonces, pero ahora me voy a tomar un descanso. Depende de eso”. ¿Seguirá? El tiempo lo dirá…

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