El escándalo del fútbol mexicano que sacudió a todo un país
La selección mexicana de fútbol ha estado, en los últimos años, acompañada por la polémica. Desde el año 2008 hasta la actualidad, algunos de sus futbolistas han generado gran controversia, sobre todo, por su afición a las fiestas en las que no han dejado de protagonizar inoportunos momentos.
La inseparable historia de 'El Tri' con este tipo de escándalos extradeportivos ha marcado a toda una generación de futbolistas, que vivieron su polémica más recordada después del fracaso en el Mundial de Sudáfrica de 2010, cuando cayeron eliminados ante Argentina en octavos de final.
Pocos meses después de aquel traspiés, el 7 de septiembre de 2010, tras un amistoso ante Colombia, tuvo lugar la llamada 'Fiesta de Monterrey'.
En ella estuvieron presentes conocidas figuras del combinado nacional mexicano con un grupo de féminas entre las que se encontraba la popular Yamille Herrera, que fue vinculada al zaguero Carlos Salcido y al que conoció a través de redes sociales.
Aquello fue todo un escándalo en México, especialmente después de que se hicieran públicos vídeos e imágenes de lo sucedido, e implicó a jugadores como Carlos Vela, Giovani dos Santos, ‘Chicharito’ Hernández, Rafa Márquez, Efraín Juárez, Carlos Salcido, Héctor Moreno, Guillermo Ochoa, Pablo Barrera, Francisco Maza Rodríguez y Gerardo Torrado.
Sobre todo, aquello dio algunos detalles el que fuera entonces directivo de 'El Tri' Néstor de la Torre en una entrevista con le periodista David Medrano de TV Azteca, en la que aseguró, tras revisar las cámaras, que la fiesta contó con la presencia de un total de 16 jugadores.
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"Le hablé a Carlos Vela y le dije '¿hiciste esto, estos tres hicieron esto?, estas faltas hiciste tú, vas a estar castigado'. (…) No me dijeron nada, yo me entero porque llego a mi oficina y empiezo a ver los periódicos. Bronca fuerte. Yo no me di cuenta de nada", dijo De la Torre.
Según apuntó el ex directivo, los jugadores no avisaron nada ni pidieron permiso y, aunque la concentración con la selección ya se había dado por terminada, "hay un código de conducta que no se puede romper en ningún momento".
El futbolista Efraín Flores contó, según publicó TyC Sports, que Rafa Márquez le había confesado que el grupo estaba atravesando problemas que arrastraban desde Sudáfrica y que no habían podido solucionar con los directivos de la Federación Mexicana de Fútbol (FMF).
La cuestión es que aquella noche de desenfreno terminó con un severo castigo por parte de la FMF hacia los jugadores implicados: Carlos Vela y Efraín Velarde fueron suspendidos por seis meses, mientras que al resto de jugadores se los impuso una sanción económica de 50.000 pesos.
Detrás de todo ello, saltó también la polémica por lo que ya apuntaba Márquez, según TyC Sports, y es que existían importantes discrepancias entre la Federación y los jugadores, lo que quedó demostrado en un comunicado que estos hicieron público tras las sanciones.
"Queremos que quede claro y que se entienda que lo que pasó no es producto de un evento o un capricho como puede parecer, tampoco fue un acto de rebeldía ni prepotencia de nuestra parte. Es a consecuencia de errores, de mal manejo de las situaciones, una pésima relación y un diálogo casi nulo; o en el mejor de los casos unilateral con el exdirector de Selecciones Nacionales", escribieron.
Algo que también quedó patente antes del último partido de aquel año de 'El Tri', en diciembre contra Venezuela cuando los jugadores dieron ese mismo argumento a su entonces entrenador, José Manuel de la Torre, quien dijo: "No se acercaron a hablar porque el orgullo (tanto de directivos como de jugadores) a veces puede más que la cordura y la sensatez".
Dos años antes, en junio de 2008, ya se había puesto la semilla para todo lo que llegaría en año venideros con una fiesta por todo lo alto que tuvo lugar en los Estados Unidos, tras una goleada de los mexicanos (4-0) a Perú en Chicago que terminó con el portero Oswaldo Sánchez detenido y pagando una multa de 1.000 dólares para ser liberado.
Al año siguiente, el mediapunta Martín Galván llevó a un grupo de mujeres al hotel de concentración de la selección sub-17 durante el Premundial 2009 celebrado en Tijuana, hecho por el cual fue sancionado y no acudió a la cita mundialista que se celebró ese año en Nigeria.
Tras la gran polémica de 2010, saltarían de nuevo las alarmas por otro gran evento con mujeres en el hotel de concentración del equipo tras un amistoso contra Ecuador en Quito de cara la disputa de la Copa América de Argentina 2011, esta vez protagonizada por los jugadores de la selección sub-22, que tuvieron que representar a México en el torneo -junto a 5 refuerzos- por un conflicto de calendarios.
En dos noches de celebración, también con mujeres de por medio, la cosa terminó mal para los jugadores, pues, estas terminaron robándoles dinero y aparatos electrónicos por valor de unos 15.000 dólares. Un bochorno que ellos trataron de justificar culpando al personal del hotel, aunque terminaron siendo delatados por las cámaras de seguridad de sus instalaciones.
"Por lo menos tres mujeres entraron. La policía nacional encontró en el basurero llaves de habitación y preservativos usados", detalló Roberto Ramia, gerente del hotel, según publicó El Universal.
"A Diego Reyes y Jorge Enríquez les robaron ipads; a Jonathan dos Santos y Néstor Vidrio, sus carteras, documentos, 700 dólares, tarjetas de crédito, un radio Nextel; Oribe Peralta, una iPad, una radio y altavoces; Marco Fabián y Rafael Márquez, su laptop Apple y Sony; Liborio Sánchez y Luis Michel, una iPad, radio Nextel, una consola Nintendo y una Blackberry ", añadió.
Tras estos acontecimientos, Marco Fabián, Jonathan Dos Santos, Jorge Hernández, David Cabrera y Javier Cortés fueron suspendidos durante seis meses para no ser convocados con el combinado nacional durante ese periodo, que en aquel torneo quedó último clasificado de su grupo con 0 puntos ante Chile, Uruguay y Perú.
La siguiente cita con la polémica llegaría en 2013 en Brasil. Por aquel entonces se jugaba la Copa Confederaciones, acudiendo México como representante de la Concacaf, y, en su primer partido, 'El Tri' caía derrotado 1-2 ante Italia, algo que algunos jugadores ‘celebraron’ en un establecimiento de masajes llamado 'Terma Centaurus', según publicó O Globo.
En este caso, los jugadores señalados fueron Giovani Dos Santos, ‘Chicharito’ Hernández, Andrés Guardado, Javier Aquino y el ‘Maza’ Rodríguez, que se libraron de un más que probable castigo al no encontrarse pruebas palpables de lo sucedido más allá de los testimonios de las mujeres implicadas y de la información de O Globo.
Ya en 2018, llegaría otra de las más sonadas: la famosa fiesta de cumpleaños de Chicharito celebrada en una zona residencial de la Ciudad de México, con la presencia de un nutrido grupo de chicas de compañía, poco antes de la celebración del Mundial de Rusia -en el que terminarían cayendo en octavos de final ante Brasil-, durante un permiso de la selección mexicana.
En este caso, futbolistas como Héctor Herrera, Guillermo Ochoa, Raúl Jiménez, Jonathan y Giovani dos Santos, Carlos Salcedo y Marco Fabián disfrutaron de una fiesta desenfrenada, acompañada de estas chicas, que se alargó hasta la mañana del día siguiente.
Entre todos los protagonistas tuvo especial relevancia el caso del centrocampista -entonces jugador del Oporto- Héctor Herrera, quien según contó en Azteca Deportes, fue el encargado de recibir a las chicas contratadas y aquello le provocó problemas familiares que le obligaron incluso a abandonar la concentración de la selección para ir a Portugal a solucionarlos.
Otro de los protagonistas de aquello, ‘Chicharito’ Hernández, que fue vetado por aquello durante la etapa del 'Tata' Martino como técnico de ‘El Tri’, confirmó en una entrevista con el diario español El País que todos los jugadores del combinado nacional mexicano acudieron a la fiesta, a excepción del portero Jesús Corona.
No sería la última celebración cargada de polémica y protagonizada por los futbolistas mexicanos, porque, en septiembre de 2019, se vieron envueltos en otro caso similar tras caer derrotados 4-0 en un amistoso contra Argentina celebrado en los Estados Unidos.
Esta vez fue el diario digital Medio Tiempo quien se hizo eco de varias publicaciones de redes sociales que incluían imágenes y videos en las que jugadores como Chicharito o Miguel Layún aparecían en una discoteca de Nueva York con dos chicas que, según contaron, podrían haberse incluso alojado con ellos en su hotel de concentración en San Antonio (Texas).
Sus jóvenes acompañantes involucradas fueron la mexicana Kevy Caputo y la argentina María del Mar Molar, modelos e influencers que se mostraron muy cercanas a la Selección de México durante toda la gira que realizaron por los Estados Unidos, viajando de Nueva Jersey a San Antonio, como quedó patente en sus cuentas de Instagram.
Acusaciones que llevaron incluso a Layún a publicar un video en su cuenta de esta red social para dar explicaciones, negando que sucediera nada con las dos chicas y apuntando que no fueron los dos únicos futbolistas allí presentes, sino que también estuvieron acompañados por Héctor Moreno, Guillermo Ocho y Marco Fabián.
"Siempre van a hablar, pero a veces creo que es importante aclarar ciertas cosas. Al final de cuentas cada quien tiene sus acciones y todo. No sé si salió porque perdimos o no, honestamente me da igual. Es gente que le gusta crear este tipo de contenido. Ya me pasó hace varios años que me inventaron un contenido", dijo Layún en su video.
Fiestas, mujeres y polémicas han ido de la mano de ‘El Tri’ durante década y media, como seña de identidad de toda una generación de futbolistas que, pese a 5 Copas Oro y una Copa Concacaf desde 2009, han destacado más por estas controversias que por sus éxitos sobre los terrenos de juego.
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