¿Son los nuevos F-16 lo que necesita Ucrania para cambiar el curso de la guerra?
Las fuerzas aéreas ucranianas podrían contar muy pronto con el vuelo de los cazas Fighting Falcon F-16 sobre los territorios ocupados, pero ¿cambiarán algo en el conflicto el uso de estos avanzados aviones de cuarta generación?
Saber si los cazas F-16 tendrán un impacto en el conflicto es una cuestión complicada, sin embargo, el jefe del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos, el general Mark Milley, recientemente aseguró que no sería "un arma mágica".
"Los rusos cuentan con 1.000 cazas de cuarta generación", contó el jefe del Estado Mayor, Mark Milley, a los reporteros del Pentágono tras terminar una reunión virtual con el Grupo de Contacto para la Defensa de Ucrania.
El general Mark Milley explicó que, si Ucrania quisiera competir con Rusia por el control aéreo, iba a necesitar muchos cazas de cuarta y quinta generación que le otorgarían más superioridad en el aire.
El jefe del Estado Mayor también contó que lo más inteligente que podrían haber hecho los aliados de Ucrania es exactamente lo que hicieron: proveer al país con las armas aéreas defensivas necesarias.
"No existe un arma mágica en la guerra, los F-16 no lo son y ninguna otra cosa funcionaría de esa manera tampoco", añadió el general Milley, lo que nos lleva a la siguiente pregunta: ¿Cómo cambiará el uso de los cazas estadounidenses la guerra de Ucrania?
En una conversación con la periodista Amna Nawaz del medio estadounidense 'PBS News Hour', el teniente general retirado, Doug Lut, explicó que los F-16 tienen dos habilidades clave que pueden servir a las fuerzas ucranianas.
"En primer lugar, de manera ofensiva, puede proporcionar un apoyo en el aire muy preciso que ayude a las tropas en tierra", explicó Doug Lut, añadiendo que esto sería muy importante a la hora de reclamar el territorio perdido en la ofensiva que Ucrania planea para este año y el próximo.
"También como ventaja ofensiva, los cazas pueden proporcionar bombardeos en profundidad", continuó Doug Lut, lo que significa que Ucrania conseguiría atacar con mayor alcance objetivos situados detrás de las líneas enemigas.
Doug Lut explicó que la capacidad de llevar a cabo bombardeos en profundidad permitiría a Ucrania atacar importantes centros de mando y de control rusos, al igual que campamentos y bases logísticas en los lugares a los que actualmente no puede llegar, como Crimea y el Mar Negro.
En el apartado defensivo, los F-16 podrían usarse como defensa aérea para atacar aviones no pilotados, aunque, según el teniente general retirado Doug Lut, serían más útiles contra objetivos como misiles de crucero que buscan atacar las infraestructuras ucranianas.
"Así que, tanto en el plano ofensivo como en el defensivo", explicó el general retirado estadounidense Lut, "los F-16 podrían marcar la diferencia", aunque también mencionó que aún faltarían meses para verlos en acción.
Donde parece que los cazas F-16 no supondrían una gran diferencia, según el medio 'Bussiness Insider', es en el combate directo contra los sistemas de defensas aéreos más modernos de Rusia como los S-400.
El mismo medio, 'Business Insider', habló con el director ejecutivo del Instituto Mitchell de Estudios Aeroespaciales, Douglas Birkey, quien apuntó que los ucranianos probablemente tendrían que tener más inventiva con el uso de los cazas de 40 años de antigüedad para ver resultados en el campo de batalla.
"Ucrania sigue contra las cuerdas. No pueden ganar en un conflicto centrado en la guerra de desgaste", explicó Douglas Birkey del Instituto Mitchell, añadiendo que Rusia, "finalmente ganaría esa guerra agotando por completo a Ucrania".
Douglas Birkey también dijo que los F-16 podrían acabar con el impasse que se estaba produciendo en tierra, pero luego apuntó que para que los aviones fueran efectivos las Fuerzas Aéreas ucranianas tendrían que adoptar una serie de tácticas muy específicas que explotaran las vulnerabilidades de las defensas aéreas rusas.
"Nadie está de acuerdo con que los F-16 ucranianos vuelen sin control sobre las defensas rusas. Para que el uso del poder aéreo sea efectivo se requiere una mezcla de estrategia, táctica, capacidades y tecnología que vaya a lograr los efectos deseados", dijo Douglas Birkey, añadiendo que los aviones no pilotados podrían ser usados para confundir a las defensas rusas ofreciéndoles una oportunidad a los F-16 ucranianos de atacar sus objetivos.
Es decir, los F-16 pueden tener un papel importante en la guerra y su llegada a Ucrania, aunque no decisiva, es mejor que nada según lo apuntado por Birkey. Sin embargo, los cazas pueden no cambiar el transcurso del conflicto, aunque sí parece que serán bastante útiles a la hora de recuperar territorios perdidos.