Mijaíl Popkov, el asesino en serie que se ofrece a Putin para luchar en Ucrania
El hombre entre rejas de la imagen cumple condena en una cárcel rusa. Doble cadena perpetua por asesinar a 83 mujeres entre 1992 y 2007. Su nombre es Mijaíl Popkov y, según publicó Daily Mail, pretende alistarse para ir a Ucrania a luchar por Putin.
Le apodaron 'el hombre lobo' y fuentes policiales sostienen que la cifra real de sus víctimas, siempre mujeres, puede ascender a 200. Actuaba en la lejana Siberia.
Mijaíl Popkov ejercía una enorme violencia con sus víctimas (a quienes asesinaba con martillos, hachas, palas...) pero en su vida cotidiana era un ciudadano respetable: policía, casado y con un hijo. Se le llegó a encargar la investigación de algunos de sus propios crímenes.
Según Daily Mail, Mijaíl Popkov explicó en una entrevista a la televisión estatal rusa al ser preguntado cuál era su sueño: "Alistarme al ejército (...) A pesar de que he estado en prisión durante 10 años, no creo que sea tan difícil aprender nuevas habilidades".
Lo que Mijaíl Popkov se propone no es ninguna locura. El Grupo Wagner, milicia privada compuesta por mercenarios, ofrece a convictos ir al frente. Y, tal y como publicó The New York Times, algunos de esos convictos, tras un periodo de combate, son indultados. Eso, al menos, publicita Wagner (y no desmiente rotundamente el gobierno ruso).
El diario británico Daily Mail calcula que unos 40.000 presos rusos podrían haber partido hacia Ucrania a combatir.
Sería escandaloso que un criminal como Mijaíl Popkov engrosase las filas de los combatientes rusos en Ucrania pero, además, rompería la norma establecida por el Grupo Wagner de no alistar a mayores de 50 años (Popkov tiene 58). Sin embargo, la extraña entrevista en la televisión estatal rusa desconcierta. ¿Era propaganda política o sólo puro morbo?
En dicha entrevista, Mijaíl Popkov habló de arrepentimiento pero en unos términos un tanto equívocos. No dijo exactamente "me arrepiento" aunque sugirió algo similar: "Tengo mucho de lo que arrepentirme. Nada de esto habría pasado si yo no hubiera hecho esas cosas. (...) Es un deseo natural de cualquier persona (arrepentirse.) He tenido mucho tiempo para pensar".
Pero resulta difícil conceder algún tipo de perdón para los crímenes de Mijaíl Popkov: era un depredador que conducía a mujeres a los bosques siberianos y allí las maltrataba con inusitada violencia y las mataba a golpes.
Su obsesión era "limpiar" de "malas mujeres" el rincón de Rusia en el que vivía.
De cara a Occidente, que un asesino en serie se incorpore a las filas de quienes luchan por Putin en Ucrania no es precisamente una buena publicidad. Pero hay una corriente muy dura (la que representa el Grupo Wagner) que apuesta por admitir todos los medios (y a todo los hombres necesarios, sea cual sea su pasado) de cara a ganar la guerra.
También hay dudas sobre si los indultos que promete el Grupo Wagner se consuman. En The New York Times informaban de cómo Wagner asegura que ya hay presos que han quedado libres por sus acciones de guerra en Ucrania pero, a la vez, sólo el Kremlin puede indultar y no hay una confirmación oficial al respecto.
Los 40.000 presos que habría reclutado Wagner para la guerra en Ucrania supone más del 10% de la población penitenciaria rusa. La propuesta resultó exitosa.
La idea del Grupo Wagner parece inspirarse en películas como 'Dirty Dozen ('Doce del patíbulo'), que convertía a un grupo de condenados estadounidenses en héroes de la Segunda Mundial.
Lo cierto es que el Grupo Wagner alardea de un estilo mercenario e inmisericorde que incluye utilización de presos como carne de cañón, ejecuciones sumarias y disciplina brutal.
Lo que Mijaíl Popkov pide es que le pongan en libertad para volver a matar. Aunque esta vez por la patria rusa y con la posibilidad de convertirse en un héroe. Una perversa derivada de la locura de la guerra: que un asesino en serie sea enviado a luchar al frente.