Melania Trump traiciona a Donald Trump con sus últimas declaraciones

Melania Trump, la tercera esposa del polémico ex presidente, rara vez ha expresado sus opiniones políticas en público. Sin embargo, ha revelado algunas opiniones que no coinciden en absoluto con las de su marido ni con las del conservador Partido Republicano.

En su autobiografía, que se publicará en Estados Unidos el 8 de octubre, Melania defiende apasionadamente el derecho al aborto, según ‘The Guardian’.

Melania Trump toma una drástica e inesperada decisión

“Es imperativo garantizar que las mujeres tengan autonomía para decidir su preferencia de tener hijos, basándose en sus propias convicciones, libres de cualquier intervención o presión del gobierno”, escribe la esposa del candidato republicano.

Mientras tanto, las amenazas de Donald Trump a los derechos reproductivos de las mujeres han jugado un papel central en su campaña presidencial.

En medio de críticas tanto de demócratas como de republicanos, JD Vance, la elección de Donald Trump para vicepresidente, ha dicho que apoyaría una prohibición nacional del aborto, algo que la esposa de su jefe claramente no aprobaría.

Por otra parte, Donald Trump se ha estado contradiciendo mucho en este asunto. Si bien se ha autodenominado “el presidente más pro vida de la historia”, recientemente dijo que no firmaría una prohibición nacional del aborto.

“Restringir el derecho de una mujer a elegir si quiere interrumpir un embarazo no deseado es lo mismo que negarle el control sobre su propio cuerpo. He mantenido esta creencia durante toda mi vida adulta”, se lee en las memorias de Melania Trump, según ‘The Guardian’.

En 2022, tres jueces instalados cuando Donald Trump era presidente votaron para anular Roe v Wade, el fallo que había protegido los derechos federales al aborto desde 1973. Desde entonces, los estados gobernados por republicanos han instituido prohibiciones draconianas del aborto.

Las leyes restrictivas sobre el aborto han dado lugar a un aumento de las muertes infantiles y maternas. En el año posterior a la prohibición del aborto en Texas, la mortalidad infantil se disparó un 12,9%, en comparación con un aumento del 1,8% en el resto del país, según un estudio reciente publicado por la red pediátrica JAMA.

“Muchas mujeres optan por abortar por cuestiones médicas personales. Pensemos, por ejemplo, en la complejidad inherente a la decisión de si la madre debe arriesgar su propia vida para dar a luz”, dice Melania en su libro.

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Melania también defendió el derecho al aborto en etapas avanzadas del embarazo, un procedimiento que su marido ha demonizado repetidamente, llegando tan lejos como para afirmar falsamente que el candidato a vicepresidente de Harris, Tim Walz, está de acuerdo con la "ejecución después del nacimiento" durante el debate contra Harris.

“Históricamente, la mayoría de los abortos realizados durante las últimas etapas del embarazo eran el resultado de graves anomalías fetales que probablemente habrían provocado la muerte o el nacimiento sin vida del niño. Tal vez incluso la muerte de la madre”, escribe Melania sobre el aborto en las últimas etapas del embarazo.

Melania también fue a expresar empatía y solidaridad con los activistas ‘pro-choice’ (pro-elección), otra gran sorpresa dado que hay una enorme desaprobación de Donald Trump dentro del movimiento.

Melania escribió que "Mi cuerpo, mi elección" debería aplicarse tanto a las mujeres "pro-elección" como a las "pro-vida", diciendo que "normalmente se asocia con mujeres activistas", pero que en realidad se ajusta al "derecho de cualquier mujer a tomar una decisión independiente que involucre su propio cuerpo".

Según Tresa Undem, que ha encuestado a personas sobre el aborto durante más de dos décadas, es posible que el lanzamiento del libro, tan cerca de las elecciones, sea una acción de campaña dirigida a los votantes republicanos que apoyan el derecho al aborto.

Sin embargo, Undem también reconoce que las opiniones de Melania parecen haber existido durante mucho tiempo y los votantes de Trump probablemente "no piensan que ella tenga ningún tipo de posición política, peso o influencia " sobre su esposo, dijo a ‘The Guardian’.

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