Lo que significa la arrasadora victoria de la extrema derecha en Francia

Conmoción en Francia. La primera vuelta de las elecciones legislativas anticipadas se saldó con la victoria del partido de extrema derecha Agrupación Nacional (RN). Las previsiones se cumplieron y se abre un ciclo totalmente nuevo en la política francesa y europea.

Con el 33,15% de los votos en la primera vuelta, Agrupación Nacional (RN) confirma su posición como primer partido en Francia. Ya ganó con fuerza las elecciones europeas del 9 de junio, motivo por el que el presidente Macron decidió disolver la Asamblea y convocar legislativas.

Liderando en 297 distritos electorales de 577, la formando capitaneada por Marine Le Pen y Jordan Bardella (en la imagen) muestra resultados particularmente altos en las zonas rurales y en el noreste y sureste del país.

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Proveniente de la unión de distintos partidos de izquierda, el Nuevo Frente Popular (NFP) ocupa el segundo lugar a nivel nacional, con el 27,99% de los votos emitidos.

La izquierda ocupó el primer lugar en 159 distritos electorales. Alcanza sus puntuaciones más altas en el suroeste de Francia, en la región de Lyon, así como en los suburbios y el este de París.

La hasta ahora principal fuerza política, los partidos centristas agrupados en torno al presidente de la República, Emmanuel Macron, esta vez sólo ocuparon la tercera posición con un porcentaje del 20,83%.

La coalición Juntos, del presidente Macron y el Primer Ministro Gabriel Attal (en la imagen), sufrió un importante declive y obtuvo el primer lugar en sólo 70 distritos electorales, especialmente en el oeste del país y en la capital.

Liderando sólo en 20 distritos electorales, la derecha tradicional representada por Les Républicains obtuvo sólo el 6,57% de los votos, una puntuación incluso más baja que en las elecciones europeas. El partido resiste en algunos puntos fuertes, como Auvernia o Saboya.

Según una proyección realizada por Ifop-Fiducial para Le Figaro , la extrema derecha de RN podría enviar entre 240 y 270 diputados a la futura Asamblea Nacional (aunque, atención, queda la segunda vuelta, donde los resultados pueden ajustarse bastante).

Dichas proyecciones apuntan a que la formación ultra liderada por Jordan Bardella carecería de mayoría absoluta. Pero tendría una mayoría relativa y estaría en una posición de fuerza para intentar imponer un gobierno de cohabitación a Emmanuel Macron.

Con un número de diputados estimado entre 180 y 200, la izquierda, por el contrario, no logró obtener resultados suficientemente elevados como para aspirar a tener su propio gobierno.

En cuanto a la coalición “Juntos”, sólo tendría entre 60 y 90 diputados en la futura Asamblea. Después de perder la mayoría absoluta en 2022, la gente de Macron ya no puede gobernar Francia en solitario.

Los Republicanos, que representan la derecha tradicional histórica en Francia, se quedarían entre 30 y 50 diputados, según la misma proyección. Otras fuerzas políticas obtendrían entre 13 y 21 cargos electos.

Pero, por el método de segunda vuelta de Francia, estas estimaciones siguen siendo muy inciertas y dependen de lo que macronistas e izquierda decidan. Si ambas fuerzas retiran a los candidatos que hayan quedado en tercera posición para que sólo pelee el candidato mejor situado contra la extrema derecha, habrá opciones de cambiar el panorama.

La izquierda y el campo presidencial ya han anunciado su intención, salvo algunas excepciones, de bloquear a RN retirando al candidato que haya quedado tercero.

Si la ultraderecha de RN se convierte en la fuerza líder en la Asamblea Nacional sin tener una mayoría absoluta, los otros partidos podrían intentar un gobierno de amplio espectro que integre a izquierda, centro e, incluso, derecha tradicional.

Será el 7 de julio cuando se celebre la segunda vuelta de las elecciones legislativas francesas y se verá si la extrema derecha francesa logra hacerse con el gobierno del país, hecho inédito en su historia desde que el general Pétain accedió a colaborar con los nazis.

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