Las armas occidentales que están marcando la diferencia en Ucrania

Puede que pocos pensaran que Ucrania sería capaz de resistir el ataque de Rusia cuando el país gobernado por Putin les invadió en febrero de 2022. Una mayoría predijo que las tropas de Zelenski caerían en unos pocos días y que Putin se anotaría una nueva victoria. Sin embargo, Kiev resistió el empuje ruso y así es como las cosas cambiaron.

Tan pronto como el resto del mundo vio que Ucrania no iba a dejarse ganar sin, antes, luchar para defender su territorio, el resto del mundo comenzó a apoyar al país de Zelenski. Occidente pronto envió apoyo armamentístico y munición a las tropas ucranianas marcando un antes y un después en en el conflicto.

Las fuerzas armadas ucranianas no solo repelieron a las fuerzas invasoras de Putin, sino que también comenzaron a expulsar a Rusia de los territorios que ocupaba. Gran parte de la defensa de Ucrania, así como su ataque, se redujo a la voluntad de lucha del país y las armas occidentales que utilizó.

Sin duda, el arma más llamativa de los primeros combates es la FGM-148 Javelin, fabricada en Estados Unidos. Este misil antitanque portátil se usó en emboscadas y en importantes contraataques que cobraron vital importancia en los primeros meses de la guerra.

"Durante los primeros meses de la guerra, el bando ruso tendía a permanecer en columnas cuando intentaba penetrar en las áreas urbanas. Un operador de jabalina podía disparar desde un edificio o permaneciendo detrás de un árbol y desaparecer antes de que los rusos pudieran tomar represalias", informaban desde CNN recientemente.

Michael Armstrong, de la Universidad de Brock, contaba a CNN en el primer aniversario de la guerra que los Javelins eran importantes porque eran un arma barata y más fácil de enviar a Ucrania.

Sin embargo, las jabalinas estadounidenses no fueron las únicas enviadas a Ucrania. En un informe publicado en agosto de 2022, The Economist señalaba que Gran Bretaña ha enviado su Arma Antitanque Ligera de Próxima Generación (NLAW) a Ucrania y Suecia le ha dado al país su AT4, lo que ha marcado un antes y un después en el conflicto.

Y luego está el potente Bayraktar TB2, un vehículo aéreo no tripulado de fabricación turca que resultó crucial para destruir la artillería y los vehículos blindados rusos.

"El Bayraktar TB2 hace lo que se supone que debe hacer", dijo a Reuters su diseñador Selcuk Bayraktar en la exposición de mayo de 2022 en Bakú, Azerbaiyán, "al eliminar algunos de los sistemas antiaéreos, sistemas de artillería y vehículos blindados más avanzados".

Además, el sistema de cohetes de alta movilidad estadounidense M142 (Himars) revolucionó el empuje ucraniano en el campo de batalla. El sistema Himars tiene un alcance de 80 km con la munición provista, lo que permite a los ucranianos alcanzar objetivos estacionarios importantes en la retaguardia rusa, tal y como apuntaban desde BBC News.

"Este arma se ha usado a lo largo del frente oriental de Ucrania, lanzando munición a unos 80 kilómetros tras las líneas rusas", dijo a la BBC Phillips O'Brien, de la Universidad de St Andrews, agregando que el sistema Himars también había alcanzado puestos de mando, cuarteles y otros puntos estratégicos rusos.

Estos sistemas de artillería móvil fueron clave en los éxitos de la contraofensiva ucraniana en la zona de Kharkiv y Kherson durante el verano de 2022. Sin embargo, también están siendo decisivos en la guerra de Ucrania algunos sistemas fijos de artillería.

Según Reuters, los sistemas de artillería autopropulsada que cumplen con el estándar de la OTAN de proyectiles de 155 mm, como el sistema francés Caesar, el alemán PzH2000, el polaco AHS Krab, el eslovaco Zuzana 24, el sueco Archer y el estadounidense M109, han sido determinantes en Ucrania.

Tampoco hay que olvidar otras armas como la M777 estadounidense, capaz de lanzar proyectiles guiados a una distancia de 40 km, "lo suficientemente lejos como para superar el alcance de todas las armas rusas, excepto las más poderosas", informaban desde Forbes.

Y durante la segunda mitad de la guerra, el sistema de defensa aéreo ucraniano se vio reforzado por la llegada del German Gepard y del American Patriot Missile Air Defense System, que protegían la red energética y las ciudades de Ucrania contra los bombardeos rusos.

Reuters señalaba que el Sistema Nacional Avanzado de Misiles Tierra-Aire de Noruega y el sistema IRIS-T de Alemania "brindan defensa contra los misiles a medida que se acercan a sus objetivos", una característica importante que ayudó a defender los cielos ucranianos del ataque ruso.

Pero la munición es tan importante como las armas que la disparan. En este sentido, los proyectiles de artillería M982 Excalibur han sido elogiados por su exactitud y precisión, especialmente durante la ofensiva de Kherson, según apuntaban desde Business Insider.

"Si no hubiera sido por las municiones de artillería, Ucrania habría tenido un gran problema", dijo a Reuters Rob Lee, investigador principal de Foreign Research Policy. "Las municiones guiadas con precisión disparan menos proyectiles. La capacidad de destruir objetivos de un solo golpe es una gran ventaja".

Según Reuters, el misil antirradiación de alta velocidad AGM-88 estadounidense se utilizó para neutralizar los sistemas de radar de defensa aérea de la era soviética con base en tierra. En alta mar, los misiles antibuque Harpoon, donados por Dinamarca, salvaron las costas ucranianas.

Especial atención, también, a los vehículos blindados que combaten en Ucrania llegados desde Occidente, como lo son los Bradley Fighting Vehicles y el American Stryker. También destacan en este área el British Challenger II y el German Leopards.

Para muchos, la mayoría de estos vehículos con los que cuenta Ucrania de cara a su contraofensiva son mejores que los usados por Rusia. Sin embargo, aún está por ver cómo funcionarán cuando se enfrenten a los potentes tanques rusos T-72 y T-62.

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