Grupo Wagner: la misteriosa fuerza paramilitar rusa que recluta presos para luchar contra Ucrania
Un mural en Serbia (en su capital, Belgrado) rinde homenaje al grupo Wagner, fuerza paramilitar privada que combate a favor de Rusia en diferentes territorios. Actúa siempre en la sombra, en los márgenes, sin control, ejerciendo (según numerosos testimonios) el terror. Son mercenarios y, según ha reveló un vídeo publicado por The New York Times y otros medios, reclutan en cárceles para luchar en Ucrania a favor de Putin.
El grupo Wagner aparece en 2014 durante la anexión de Crimea. La Unión Europea considera que su líder y fundador es Dmitry Utkin, ex agente del espionaje ruso y veterano de las guerras de Chechenia cuyas tendencias filonazis llevaron a nombrar esta red de soldados irregulares homenajeando al músico preferido de Hitler. El escudo del grupo Wagner (en la imagen) también tiene evocaciones de las SS.
El Alto Representante de la Política Exterior de la Unión Europea, el español Josep Borrell, dijo en 2021 del grupo Wagner que "supone una amenaza y provoca inestabilidad en varios puntos del planeta". Aunque se trata de "tropas invisibles" y nunca declaran abiertamente su presencia, prensa y ONG's han podido detectar a la red Wagner en las guerras de Siria, Donbás, Libia o República Centroafricana. Y ahora, claro, estarían luchando en Ucrania.
El vídeo que ha circulado durante este mes de septiembre (y del que forma parte esta imagen) muestra a un hombre arengando en idioma ruso a un grupo de reclusos en el patio de una cárcel. Les promete la libertad a cambio de ir a luchar a Ucrania a favor de Rusia.
Según The New York Times, "el hombre de las imágenes parece ser Yevgeny V. Prigozhin", oligarca cercano a Putin (en la imagen, ambos durante un acto conjunto). Este empresario, tras años negando su vínculo al grupo Wagner, admitió haber participado en la fundación de esta fuerza, según recogió Reuters.
Como en la película 'Doce del patíbulo (The Dirty Dozen)', dirigida por Robert Aldrich en 1967, la red Wagner propone la disyuntiva de "morir entre rejas" o "combatir con honor por Rusia". Hay informaciones previas a la difusión del vídeo difundido en septiembre que ya apuntaban a esta práctica de reclutamiento en cárceles rusas como algo habitual para los hombres de Wagner.
Este es un retrato realizado en París por el fotógrafo francés Stephane de Sakutin. Quien posa para la cámara es Marat Gabidullin, un hombre que combatió con el grupo Wagner llegando al grado de comandante y después renegó de ese pasado mercenario y escribió un libro con sus experiencias.
Al ser preguntado sobre posibles crímenes de guerra cometidos por la red Wagner, Marat Gabidullin dijo en una entrevista a Radio Francia Internacional: "¿Quién es un soldado Wagner? Es un hombre que no rinde cuentas. No tiene una existencia legal, ni un estatus claro. Actúa con absoluta impunidad. Nunca responderá por sus acciones, por sus crímenes en un tribunal. Así que todo depende de su personalidad".
Marat Gabidullin también asegura que la red Wagner opera en colaboración con el ejército ruso. "Sin duda, y es normal".
También contaba el ex mercenario que, al menos en su caso, el sueldo merecía la pena: 3.700 euros al mes cuando estaba en combate.
Durante años, Yevgeny Prigozhin, al que llaman 'el chef de Putin' por sus negocios de cocina y catering, fue señalado como creador y financiador del grupo Wagner pero lo negó reiteradamente e, incluso, denunció a algún periodista por afirmarlo . En septiembre de 2022, mediante un comunicado que recogió Reuters, admitió haber fundado "un grupo de patriotas que luego pasó a llamarse Batallón Wagner".
Pero más allá de esa revelación, sigue el enigma. ¿Quiénes más lo financian, cómo se organiza, qué tipo de organización es? Wagner resulta un misterio y, como tal, da lugar a historias difícilmente comprobables. Como su presencia en Venezuela para proteger a Nicolás Maduro durante el crítico año de 2019, en el que arreciaron las protestas contra el régimen chavista. ¿Leyenda o realidad?
También se ha publicado que el grupo Wagner tuvo una presencia significativa en Libia, donde varias facciones pelean por el poder. Según Euronews, unos 800 soldados de Wagner habrían apoyado en 2019 al mariscal Jalifa Hafter.
Wagner compagina ultranacionalismo ruso con mero negocio. Algunas intervenciones internacionales (en Sudán, por ejemplo) estarían guiadas por un simple afán monetario. Peleando por el mejor postor.
Sea como sea, en 2021 la Unión Europea, según recoge la Wikipedia, "dictó sanciones contra el Grupo Wagner y sus responsables, incluidos Utkin y Prigozhin, por la 'violación de derechos humanos' en Siria, Libia, República Centroafricana, Sudán, Mozambique, así como por su actuación armada contra la 'integridad territorial, soberanía e independencia de Ucrania".
La milicia privada que forma Wagner es un ejército en la sombra fuera de las reglas de la guerra, sin límites, dispuesto a apoyar a Rusia de todas las maneras posibles.