Fracaso del sueño chino de hacer un canal interocéanico a través de Nicaragua

Es el Canal de Panamá una de las grandes maravillas del mundo moderno y, por ello, muchos se han preguntado (a lo largo de la historia) si una ruta alternativa o complementaria podría ser posible. Algo así como el sueño del Canal de Nicaragua.

CNN informa que el gobierno de Nicaragua ha revocado una concesión otorgada a una empresa china para construir el Canal Interoceánico, que conectaría el Océano Pacífico y el Atlántico.

El ambicioso megaproyecto ayudaría a abordar las carencias del Canal de Panamá en una era de comercio global, superando la vía navegable centroamericana construida por Estados Unidos en 1914.

La agencia de noticias alemana DW escribe que el proyecto fue anunciado por primera vez por el presidente Daniel Ortega y el empresario chino Wang Jing en diciembre de 2014. Sin embargo, el megaproyecto de 50 mil millones de dólares nunca llegó a realizarse.

Si el proyecto hubiera tenido éxito, la empresa promotora dirigida por Wang Jing (en la foto) podría tener la opción de extender el contrato de arrendamiento por otros 50 años.

Según el sitio web de noticias latinoamericano Infobae, el presidente Daniel Ortega presentó en su día el proyecto como “la obra de ingeniería más grande del mundo en toda la historia de la humanidad”.

También hay un ángulo político. Tanto China como Nicaragua, gobernada por los sandinistas de forma intermitente desde la década de 1980, son percibidas como antagónicas a Estados Unidos.

Controlar uno de los principales corredores de comercio entre hemisferios se traduciría en poder para Beijing y dinero para Nicaragua.

En 2013, la Asamblea Nacional de Nicaragua aprobó una concesión de 50 años para financiar y gestionar el canal a HK Nicaragua Canal Development Investment Group durante 50 años.

Según CNN, la corporación china prometió que el proyecto estaría listo para 2020, pero no hubo más avances tras el anuncio.

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Sin embargo, desde sus inicios, la idea del Canal de Nicaragua trajo muchas polémicas y críticas, tanto dentro como fuera de la república centroamericana.

El megaproyecto conectaría ambos océanos con el lago de Nicaragua, el cuerpo de agua más grande de Centroamérica y una importante fuente de agua potableen la región.

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Amnistía Internacional condenó la construcción del Canal de Nicaragua, afirmando que su construcción y mantenimiento desplazaría a decenas de miles de personas, dejando a mucha gente sin hogar.

El informe elaborado por Amnistía Internacional también afirmó que el gobierno de Ortega persiguió y silenció las voces disidentes que protestaban contra el Canal de Nicaragua.

Según DW, agricultores activistas medioambientales y llevaron el caso ante la Corte Internacional de Derechos Humanos, argumentando que los grupos indígenas que serían afectados por el canal no fueron consultados por el gobierno de Nicaragua.

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DW informa que la revocación del Canal de Nicaragua ha sido descrita por activistas locales como una victoria histórica para los grupos indígenas, agrícolas y ambientalistas en la república centroamericana.

Sin embargo, queda la pregunta si el gobierno de Nicaragua encontrará la manera de hacer la vía fluvial y si, esta vez, consultará la voluntad del pueblo.

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