Alertan del ambicioso plan de Rusia y China para aumentar su influencia en Latinoamérica
Rusia y China están trabajando para aumentar su influencia en Latinoamérica, e intentando competir con Washington en la región, según la comandante del Comando General Sur de Estados Unidos, Laura J. Richardson.
Durante una charla en la Conferencia de Seguridad de Aspen, Richardson reveló la situación que se está desarrollando en Latinoamérica y habló sobre unos vínculos económicos y diplomáticos que eran la prueba del status quo que estaba teniendo lugar, según recogía Business Insider.
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"Diría que China está jugando al ajedrez", explicaba Richardson en la conferencia, antes de añadir que Pekín tenía "una visión a largo plazo" y estaba "preparando el escenario". Richardson también informó de que la Iniciativa 'Belt and Road' de Pekín estaba expandiéndose.
Richardson indicó que los 25 países de Latinoamérica que firmaron para unirse a la Iniciativa 'Belt and Road' de China eran la prueba del crecimiento de la influencia de Pekín y añadió que las inversiones chinas "cubren prácticamente toda la región".
China ha invertido en proyectos que van desde nuevos sistemas de metro y redes ferroviarias hasta telecomunicaciones y presas, todo "bajo un disfraz económico". Sin embargo, hay algunos proyectos de inversión que Richardson cree que son preocupantes.
Las inversiones chinas en proyectos de infraestructura clave en los que se incluyen puertos de aguas profundas y en otros sectores como el de la energía, ciberseguridad y el espacio, que podrían tener un uso militar, son un gran problema. "Esto es un problema global", afirmaba Richardson.
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"Me hacen sospechar cuando se tratan de infraestructuras claves", recalcaba Richardson en el foro de seguridad, según un comunicado de prensa del Departamento de Defensa de Estados Unidos, "Me preocupa la doble naturaleza de uso de estas [infraestructuras]".
"Estas son empresas propiedad de un gobierno comunista", añadía Richardson. "Me preocupa el cambio de eso a aplicaciones militares". Pero la intrusión de China en la región no es lo único que preocupa a Richardson.
Moscú también está haciendo incursiones en América Latina. Pero Richardson señaló que, mientras que China estaba "jugando al ajedrez" en la región, Rusia estaba "jugando a las damas", dando a entender que el Kremlin no estaba operando al mismo nivel que Pekín.
Según el Departamento de Defensa, Richardson señalaba el envío de buques de guerra por parte de Rusia para visitar Cuba, Venezuela y Nicaragua, además de visitas de altos miembros del gobierno a estas naciones, como prueba de la intrusión rusa en la región.
Los intentos de Rusia por establecer relaciones con las naciones latinoamericanas no tienen un carácter tan a largo plazo como los proyectos en los que está invirtiendo el gobierno chino, pero está claro, debido a lo que ha sucedido durante el último año en América del Sur, que es un objetivo para los adversarios de Estados Unidos.
Richardson explicó que Estados Unidos ha pasado por alto durante mucho tiempo la región, refiriéndose a la situación como "ceguera sobre el sur", y explicando a los asistentes de la Conferencia de Seguridad de Aspen por qué Washington debería tener un papel más activo en la región.
"Tenemos que ser conscientes de cómo de ricos en recursos son nuestros vecinos y cómo de cercanos están nuestros competidores y adversarios en la región", explicaba Richardson. Tanto si sus consejos serán escuchados o no, es algo que aún está por ver.
Uno de los mayores problemas al que Estados Unidos se enfrenta en América del Sur es la falta de un embajador en algunas naciones. Los embajadores son uno de los mayores activos de la región del Comando Sur de Estados Unidos, según Richardson.
Sin embargo, debido a que muchos embajadores no han sido confirmados con rapidez, muchas de las naciones al sur de Estados Unidos no cuentan con esta figura. "Tenemos un tejido de enlace absoluto con todas nuestras embajadas estadounidenses en la región", afirmaba Richardson.
Otro de los principales impulsores de la influencia estadounidense en la región es el poder económico de varias agencias estadounidenses como el Departamento de Comercio, la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional, la NASA, el Banco de Desarrollo Interamericano, las Cámaras de Comercio de América y la Corporación Financiera de Desarrollo Internacional de Estados Unidos.
"Realmente creo que la seguridad económica y la seguridad nacional van de la mano aquí en este hemisferio, y tenemos que trabajar en ambos y muy rápidamente", explicaba Richardson antes de recalcar que hay que aumentar la influencia de Estados Unidos en Latinoamérica.
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