No siempre fue así: la tremenda transformación de Luis de la Fuente
Es uno de los hombres de moda en el fútbol europeo: Luis de la Fuente. Llegó a la Eurocopa como un entrenador desconocido y, ahora, se va con el reconocimiento de todo el mundo por su trabajo y la admiración general por su físico hercúleo.
Y es que, más allá de lo bien que juegue La Roja, si algo ha impresionado en esta Eurocopa han sido los brazos y pectorales del entrenador de La Roja. Un portento físico que ha trasladado su filosofía a los jugadores y eso se ha notado.
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Nacido en 1961, De la Fuente llegó a la Selección en diciembre de 2022, con un look similar al actual: cabeza rapada, barbita perfilada y dos brazos que podrían destrozar un BMW X5 en menos de un minuto.
Esta imagen impecable actual contrasta, de forma significativa con la imagen del Luis de la Fuente pretérito, cuando aún tenía algo de pelo y aún no había dado el paso por el rapado absoluto y radical.
Foto: X - @Mario__RM
Más curioso resulta viajar al siglo pasado, a finales de los 80, cuando De La Fuente jugaba en el Sevilla y lucía rizos y bigotazo de moda en la época. Cuesta reconocerle.
Foto: RTVE
A principios de los 80, Luis de la Fuente había debutado en primera con el Athletic de la mano de Javier Clemente, jugando de lateral izquierdo.
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Y ojo, que jugando en equipos como Athletic de Bilbao, Sevilla y Alavés, el palmarés de Luis de la Fuente presume de dos Ligas, una Copa del Rey y una Supercopa. Eso sí, a pesar de jugar en todas las categorías inferiores de la Selección, incluso ser olímpico, no llegó a debutar con la selección absoluta.
La vida le ha dado una oportunidad de resarcirse y, quién sabe, si emular a Luis Aragonés, Vicente del Bosque o José Villalonga, los entrenadores que han ganado las tres Eurocopas que luce España en su palmarés.
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Una victoria que, de producirse, tendría en el físico una de sus claves. Y es que el seleccionador ha buscado que los jugadores estén como él, más fuertes que el vinagre.
Y si alguien quiere saber el secreto del portentoso físico de Luis de la Fuente, la respuesta la da el propio entrenador: "Levantar hierro". Horas de gimnasio, disciplina en la comida y trabajo constante.
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