Messi o Maradona: ¿quién es el mejor?
Un debate candente e inagotable: quién es mejor, ¿Messi o Maradona? Repasamos argumentos, estadísticas y otros datos.
Durante años, eran muchas las voces que sostenían firmemente que Messi jamás estaría a la altura de Maradona porque le faltaba su Mundial, ese que ‘El Diego’ ganó en México’86 -con momentos tan míticos como ‘la mano de Dios’- . La imagen para la historia, Diego Armando Maradona saliendo a hombros del estadio Azteca.
Pero ese Mundial anhelado por Messi (y por toda la Argentina) llegó por fin en diciembre de 2022. Y Messi emuló a Maradona cuando paseó a hombros por el estadio Lusail de Doha.
Pero vayamos a los datos y también a lo subjetivo, a eso que no puede medirse y tiene más que ver con los sentimientos. ¿Messi o Maradona? ¿Quién es el mejor?
Lo primero que hay que tener en cuenta es que la comparación entre ambos resulta complicada teniendo en cuenta que vivieron en diferentes épocas y diferentes formas de ver y jugar al fútbol, lo que puede relativizar los datos según se mire de un lado o de otro.
Comenzando por la trayectoria de uno y otro en la selección, según la web de TransferMarkt.es, Diego Armando Maradona jugó a lo largo de su carrera (de 1977 a 1994) un total de 90 partidos vistiendo la elástica albiceleste desde su debut a los 16 años, 3 meses y 28 días. De ellos, ganó 42 (el 46,7% de los encuentros disputados).
Participó en cuatro Mundiales (de los que ganó uno) -España 1982, México 1986, Italia 1990 y Estados Unidos 1994- y tres Copas América (donde nunca salió victorioso) -la de 1979, sin sede fija; Argentina 1987 y Brasil 1989-.
En el caso de Lionel Messi, hizo su debut con 18 años, 1 mes y 24 días y, desde 2005 (su debut) a 2022 (cuando ha levantado la Copa del Mundo) jugó un total de 172 partidos, de los cuales logró la victoria en 103 (el 59,9% del total).
En su caso, disputó cinco Mundiales (de los que ha ganado uno) -Alemania 2006, Sudáfrica 2010, Brasil 2014, Rusia 2018 y Qatar 2022-, y seis Copas América (de las que también ha ganado una) -Venezuela 2007, Argentina 2011, Chile 2015, Estados Unidos 2016, Brasil 2019 y Brasil 2021-.
En cuanto a goles con la selección albiceleste, Maradona marcó un total de 29 repartidos de la siguiente manera: 8 en 21 partidos en Mundiales; 4 en 12 partidos en la Copa América; 3 en 8 partidos de clasificación para un Mundial; y 14 goles en 38 partidos amistosos.
En el caso de Messi, los 98 goles que ha registrado a lo largo de su carrera con la selección se repartieron de la siguiente manera: 13 goles en 26 partidos en Mundiales; 13 en 34 partidos de Copa América; 28 en 60 partidos de clasificación para la Copa del Mundo; y 44 goles en 51 partidos amistosos.
Si atendemos al coeficiente goleador de ambos jugadores con la selección argentina, Maradona registró 0,32 goles por partido, mientras que Messi lo supera alcanzando los 0,57 goles por partido. Por lo que se podría decir que el rosarino ha sido más eficiente como goleador.
Y Messi no solo gana en cuanto al coeficiente sino que, además, es el mayor goleador histórico de la selección argentina en los Mundiales con esos 13 goles. Maradona queda el sexto por detrás del propio Messi, de Batistuta, Agüero, Hernán Crespo y Gonzalo Higuain.
En el caso de las asistencias de gol, Maradona registró con la selección un total de 14 (8 en Mundiales, 1 en clasificatorias y 5 en amistosos), mientras que Messi alcanzó las 55 (8 también en Mundiales, 17 tanto en Copa América como en amistosos y 11 en clasificatorias).
Y si vamos a los títulos (a nivel selecciones), Maradona ganó el Mundial de Fútbol de México 1986 (como líder absoluto de aquel equipo), la Copa Artemio Franchi de 1993 y la Copa Mundial sub-20 de Japón 1979.
Un palmarés que, sin embargo, queda por debajo del conseguido por Leo Messi. Y es que, además del Mundial de Qatar 2022, el actual jugador del PSG también puede presumir de haber ganado la Copa América 2021, la medalla de oro olímpica en 2008 y un Mundial sub-20 en 2005.
En cuanto a sus equipos, Diego Armando Maradona militó en Argentinos Juniors (1976-1980), en Boca Juniors (1981-1984), en el FC Barcelona (1982-1984), en el Nápoles (1984-1992), en el Sevilla (1992-1993), Newel’s Old Boys (1993-1994) y, de nuevo -y para acabar su carrera- en el equipo de su vida, Boca Juniors (1995-1998).
La de Leo Messi ha sido una vida más tranquila. Todo el mundo pensó que sería un ‘One Club Man’ fiel al FC Barcelona. Salió de su cantera y jugó allí defendiendo la camiseta azulgrana durante 17 temporadas, entre 2004 y 2021, para acabar yéndose al PSG y, en 2023, anunciar que fichaba por el Inter Miami.
En cuanto a los títulos a nivel de clubes, la diferencia es también importante. Maradona consiguió un Campeonato Metropolitano con Boca Juniors, una Copa del Rey, una Copa de la Liga y una Supercopa de España con el FC Barcelona; y dos ligas italianas, una Copa de la UEFA, una Copa y una Supercopa de Italia con el Nápoles.
El palmarés de Messi a nivel de clubes es bastante más amplio. Con el FC Barcelona ganó 10 Ligas españolas, 7 Copas del Rey, 8 Supercopas de España, 4 Champions League, 3 Supercopas de Europa y 3 Mundiales de Clubes. Consiguió, además, una Ligue 1 y una Supercopa de Francia con el PSG.
A nivel individual, Maradona ha sido máximo goleador en ocho ocasiones con sus diferentes equipos, ganó el Balón de Oro honorífico en 1995, el Jugador del Siglo de la Fifa en el año 2000, el Golden Foot Leyenda en 2003 o el premio al mejor jugador del siglo XX en 201, entre otras distinciones.
Messi, por su parte, puede presumir de ser el jugador con mayor número de Balones de Oro de la historia con un total de 6 (2009, 2010, 2011, 2012, 2015, 2019 y 2021), además de otros como Jugador Mundial de la FIFA 2009, Premio The Best 2019 o Laureus 2020, además de haber conseguido la Bota de Oro en 2010, 2012, 2013, 2017, 2018 y 2019.
Si hablamos de números, a nivel de clubes, Maradona jugó un total de 589 partidos entre todos sus clubes y en los que marcó 311 goles e hizo 211 asistencias, con una media goleadora de 0,53 tantos por encuentro.
En el caso de Messi, con FC Barcelona y PSG (y hasta la fecha en la que levantó la Copa del Mundo) jugó 831 partidos con un balance de 695 goles y 297 asistencias. Su promedio goleador, bastante por encima del de Maradona, está en el 0,84.
Pero ¿y dónde queda el puro sentimiento? Ese es un tema bastante distinto y alejado de los números, porque Maradona, para la mayoría de los argentinos siempre ha sido ‘Dios’, o ‘D10S’, en referencia al dorsal por el que pasó a la historia y que heredó Messi.
Maradona siempre tuvo a su lado a la afición, hasta el punto de convertirse en un auténtico símbolo y en un ‘héroe deportivo’ para Argentina. Sobre él se ha hecho música, arte e incluso una iglesia, la maradoniana.
“En el momento que Maradona se retiró del fútbol, dejó traumatizada a Argentina. Maradona fue más que un futbolista genial. Fue un factor extraordinario de compensación para un país que en pocos años vivió varias dictaduras militares y frustraciones sociales de todo tipo", escribió Jorge Valdano (futbolista, entrenador y teórico del fútbol nacido en Argentina y afincado en España).
Valdano, que fue compañero de Maradona en la selección, también sostiene que Diego Armando “fue una salida a la frustración colectiva y por eso la gente lo adora allí como una figura divina”.
Otra cosa fue su personalidad y sus excesos. La controversia por algunos aspectos de su biografía continúa hasta hoy.
La trayectoria vital de Messi y su vínculo sentimental con el país que le vio nacer es muy distinto. El rosarino dejó Argentina a los 13 años para mudarse a España e incorporarse allí a las categorías inferiores del FC Barcelona. Messi nació en Argentina, pero creció y se hizo adulto en Europa.
Al hecho de abandonar tan pronto su país, se le sumó la crisis de juego y resultados que vivió la selección de la que Messi, muy joven, fue partícipe. Además, Messi tiene personalidad tímida y poco dada al liderazgo. Un cóctel que provocó que al aficionado argentino (en general) no le entusiasmara Messi.
Mientras no paraba de ganar títulos con el FC Barcelona, Messi encadenaba fracaso tras fracaso con la selección argentina, lo que llevó a que le acusaran de no jugar con las mismas ganas cuando estaba con su club que cuando vestía la albiceleste.
El rosarino llegó a anunciar que no volvería a jugar con Argentina después de perder en la fase final del Mundial de 2014 y de las ediciones 2015 y 2016 de la Copa América. Una decisión que lo único que provocó fue un incremento de las críticas hacia él.
Sin embargo, finalmente cambió de opinión. Regresó a la selección y lo que ha hecho desde entonces es historia. Llegó a la final del Mundial de Brasil 2014, que perdió contra Alemania, ganó la Copa América en 2021 y ha terminado coronándose como el rey absoluto con el Mundial de 2022.
A los argentinos les tocará disfrutar algo más de Messi, como él mismo ha expresado, ya que, tras conseguir el título Mundial declaró ante los medios: “quiero seguir viviendo unos partidos más siendo campeón del mundo”.
Y luego está algo absolutamente imposible de definir: la poesía del fútbol, el estilo desplegado sobre el terreno de juego, la belleza de los goles... Messi y Maradona, dos modos de elevar un deporte a la categoría de arte. Y un debate siempre abierto.