Marc Cécillon: la historia de la leyenda del rugby que asesinó a su esposa

La noche del 7 al 8 de agosto de 2004, en Saint-Savin, población de la región francesa de Isère (Francia), más de 60 personas se reunieron en casa del director del club de rugby de Pont-de-Chéruy para homenajear a los jóvenes del equipo. Entre los invitados se encontraba, junto a su esposa Chantal, el ex capitán de la selección francesa de rugby Marc Cécillon.

Fue Chantal quien llegó primero a la velada. Su marido todavía estaba con sus amigos y había pasado la tarde bebiendo en exceso.

Desde que se retiró como profesional del rugby en el año 1999, Cécillon no había sido más que una sombra de lo que fue. Tras fracasar buscándose la vida como entrenador, el que fuera considerado como una auténtica estrella del deporte francés se hundió abusando de la bebida y cayendo en una profunda depresión.

Ya desde hacía varios años, Cécillon cambió su carácter hasta convertirse en una persona con la que no se podría tratar, además de violenta, lo que había conducido su relación al desastre, hasta el punto de que su esposa quería el divorcio. El ex jugador de rugby era infiel a Chantal, a la vez que mostraba peor cara como marido, celoso y posesivo. Nunca aceptaría separarse de ella y dejarla marchar.

En ese contexto, en aquella tarde del 7 de agosto de 2004, al presentarse en la fiesta ostensiblemente ebrio y lejos de poder estar en condiciones con nadie, le invitaron a marcharse. Eso sí, antes, con el pretexto de poder despedirse de los invitados, buscó hasta encontrar a su esposa, a la que pidió que le acompañara a casa.

En aquel mismo momento Chantal se negó a acompañarlo y Cécillon, fuera de sí, sacó un arma, una Magnum 357 que tenía escondida debajo de su camisa, y disparó a su esposa cuatro tiros a quemarropa.

En aquel terrible momento, fue necesaria la intervención de cerca de diez personas para reducir y desarmar al ex jugador de rugby, quien, esa noche, según pudo comprobar la policía, tenía un nivel de alcohol en sangre de 2,65 gramos. El 3 de diciembre de 2008, Cécillon fue condenado a 14 años de prisión por aquel terrible asesinato.

En agosto de 2023, Ludovic Ninet, ex periodista reconvertido en escritor, publicó el libro 'El caso Cécillon. Chantal, una historia de feminicidio', un homenaje a la mujer del ex jugador que fue asesinada en uno de los momentos más duros e impactantes de la historia del rugby francés.

Antes de todo aquello, de aquellos años de depresión y de que saliera de él lo peor del ser humano, Marc Cécillon fue un icono del deporte en Francia. Reconocido por todos sus compañeros, el jugador fue una leyenda del Club Sportif Bourgoin-Jallieu.

Con tan solo 19 años se incorporó a las filas del primer equipo del Bourgoin-Jallieu tras su paso por el Saint-Savin. Corpulento y fuerte, era un jugador muy versátil, capaz de jugar en varias posiciones.

En 1988, fue convocado por primera vez para jugar con la selección francesa de rugby, con 30 años. Con una envergadura impresionante (1,92 metros y 112 kilos), rápidamente se consolidó como una pieza clave de 'Les Bleus'.

Durante siete años, hasta 1995, Cécillon disfrutó de uno de los mejores momentos del XV de Francia, acumulando 46 convocatorias en las que fue capitán en cinco ocasiones.

En 1997, cuando tenía ya 38 años, llevó al Bourgoin-Jallieu a la final del campeonato francés, la Copa de Francia y ganó el European Challenge.

Dos años después, en 1999, el Bourgoin-Jallieu llegó hasta las semifinales del campeonato francés y, ya con casi 40 años, Cécillon demostró que seguía siendo un jugador importante dentro de la plantilla, a pesar de lo cual, este será el último partido del jugador con los 'Garnets'.

Tras abandonar su equipo de siempre, Marc Cécillon se convirtió en entrenador-jugador del Beaurepaire, un club de la cuarta división del rugby de Estados Unidos. Sin embargo, aquello no sirvió para ahogar las penas por haber abandonado su club de siempre y de ver en el horizonte que el final de su carrera era ya una realidad. Fue entonces cuando empezó a hundirse en la depresión y a beber.

El 7 de julio de 2011, Cécillon salió de prisión beneficiándose de la libertad condicional por buena conducta tras siete años entre rejas por el asesinato de Chantal. Un precio a pagar muy pequeño por acabar con la vida de alguien.

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