Inesperadas críticas de un ex jugador barcelonista al F.C. Barcelona: "Pequeñito"

A sus 41 años, el guardameta chileno Claudio Bravo se encuentro sin equipo después de rescindir su contrato con el Real Betis, de La Liga española. Pero, lejos de hablar sobre cuál será su próximo club o si colgará definitivamente los guantes, ha sido noticia por unas inesperadas declaraciones sobre uno de sus ex equipos: el F.C. Barcelona.

Bravo pasó dos campañas en la entidad azulgrana, a donde llegó procedente de la Real Sociedad en la temporada 2014-2015, y fue titular indiscutible del equipo por delante de Marc-André Ter-Stegen alcanzando unos números más que interesantes: jugó un total de 75 partidos en los que encajó 44 goles (una media de 0,59 por encuentro).

Sin embargo, a cinco días del cierre del mercado veraniego de cara a la temporada 2016-2017, se anunció su adiós al club azulgrana y su marcha al Manchester City, que lo fichó por expreso deseo de Pep Guardiola. Y han sido de estos dos equipos sobre los que el portero chileno ha hecho una comparación que ha levantado ampollas entre el barcelonismo.

En 'El Legado', un espacio dedicado a entrevistas conducido por el ex guardameta chileno Marcelo Ramírez, su compatriota Claudio Bravo respondió a la pregunta de cuál fue la principal diferencia que sintió entre los dos clubes en los que militó asegurando que "el Barça funciona como un equipo pequeñito".

ADEMÁS: El sorprendente cambio de Gaizka Mendieta: de astro del fútbol a DJ (y más)

"Es gigantesco a nivel mundial. Madrid y Barça deben ser lo más grande a nivel mediático a nivel de popularidad. Son los más conocidos. Por donde te muevas en el mundo te llenan los estadios, pero internamente es muy pequeño", apuntaba el arquero chileno.

Allí, en el Barcelona, explicaba Claudio Bravo "ves siempre las mismas caras, poca gente. Los jugadores, staff, tres o cuatro guardias, el cocinero y poco más".

Nada que ver con el Manchester City, según explicaba el jugador al que define como "un club gigantesco" internamente y al que considera, a nivel de recursos, ilimitado: "Gente en la piscina, en el vestuario, en el área médica... ¡Sobra gente!", destacaba con ironía.

"No escatiman en recursos ni en personal para que el futbolista se desarrolle de la mejor manera posible y no se preocupe de absolutamente de nada", añadía Bravo.

Síguenos y descubre cada día contenidos que te interesan

"Tu preocúpate de jugar, nosotros te tenemos al mejor fisio, al mejor preparador físico en el gimnasio, y no uno, sino dos y tres; en el área médica tienes dos camillas, no cinco; médicos tienes dos o tres", concluía alabando el buen trabajo desarrollado por el club británico.

La marcha de Claudio Bravo del F.C. Barcelona fue una noticia sorprendente después de dos años como dueño de la portería culé. Sin embargo, muchos lo achacaron a la alargada sombre del alemán Marc-André ter Stegen que podía amenazar su titularidad, lo que le habría empujado a salir entonces del club catalán.

Así lo confirmó en una entrevista del año 2016 en el programa radiofónico El Larguero, de la Cadena SER, donde aseguró aquella situación sin tapujos: "Yo no quería estar sentado en el banco. No es lo mío. Y lo entendieron".

Eso sí, aclaró, "no me fui del Barça porque estuviera Ter Stegen. (…) La presencia de Ter Stegen no tuvo nada que ver con mi marcha. No teníamos mala relación. De hecho, creo que nos beneficiábamos mutuamente. (…) Fui muy sincero. Yo no quería estar sentado en el banco”, recalcó.

Síguenos y descubre cada día contenidos que te interesan

"En Barcelona siempre me dediqué a hacerlo lo mejor posible. Siempre noté el apoyo. (…) El Barça me ofreció renovar y se lo agradezco, pero viendo cuál era su proyecto, yo tenía que defender mi postura", concluyó Bravo.

Finalmente, el guardameta chileno terminaría jugando cuatro temporadas en el club citizen, de las que solo la primera de ellas tuvo algo de continuidad como titular, pues en la campaña 2017-2018, con la llegada de Ederson Moraes se vio relegado al banquillo.

En Manchester, Bravo jugó menos y tuvo peores números. 61 partidos entre todas las competiciones (sólo 29 en la Premier League) en los que encajó 59 goles (con una media de 0,97 tantos por partido) lo que le llevó a marcharse en 2020 al último equipo de su carrera hasta la fecha, el Real Betis.

Sus mejores números y su mayor importancia dentro del equipo en el Barça, no ha impedido, sin embargo, que la imagen que hoy haya proyectado al exterior sea mucho peor que la del City, dejando al club culé en evidencia y a sus seguidores con un cabreo importante con el que fuera dos años su referente en la portería.

ADEMÁS: La serie de trágicas historias que marcaron la vida de Carlos Tévez