Pesadilla para el mítico Roberto Baggio: secuestrado, robado y agredido
Si para millones de italianos la noche de este 20 de junio será recordada como la noche en la que España humilló a Italia, para Roberto Baggio el recuerdo será definitivamente mucho más amargo. Según ha informado el Corriere della Sera, el excampeón de fútbol ha sido víctima de un robo con violencia en su villa de Altavilla Vicentina.
Según la información que ha trascendido, la pesadilla vivida por el exnúmero 10 de la selección italiana tuvo lugar a las 10 de la noche del jueves 20 de junio. Cinco personas armadas irrumpieron en la villa donde se encontraban Baggio y su familia.
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Baggio habría intentado oponer resistencia, algo que, según ha informado el diario La Repubblica, habría acabado en un forcejeo violento.
El exjugador recibió un golpe en la frente con la culata de una de las pistolas de los ladrones, provocando una herida por la que, según ha señalado la Gazzetta dello Sport, Baggio ha necesitado recibir algunos puntos de sutura.
Tras el forcejeo, los ladrones encerraron a Baggio y a su familia en un cuarto, mientras procedían con el robo. Todo el incidente habría ocurrido a lo largo de unos 40 minutos.
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Según La Repubblica, los asaltantes se habrían llevado numerosos objetos de valor, como relojes y joyas, además de algo de dinero en metálico que la familia tenía en casa.
Al darse cuenta de que los ladrones habían ya abandonado la vivienda, el que fuera Balón de Oro consiguió abrir la puerta y liberar a su familia, para después llamar a las autoridades.
Los Carabinieri se han hecho con las imágenes de videovigilancia y han abierto una investigación. Por el momento, no se conocen más detalles sobre lo ocurrido.
Tal y como informa il Giornale di Vicenza, la villa de Altavilla Vicentina, un pequeño pueblo del Véneto de unos 12.000 habitantes donde reside el exnúmero 10 italiano, es una casa rústica muy amplia rodeada de hectáreas de campos y bosques.
Roberto Baggio se retiró a esta casita de campo para cultivar su pasión por la naturaleza, en un contexto, tal y como él mismo señaló en un documental de Netflix, muy tranquilo. Quién sabe si ahora quizás, después de este gran susto, el exfutbolista ha cambiado ya de parecer.
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