Es un milagro: Anders Lind pasó de no volver a andar en 2021 a competir en los Juegos Olímpicos
La misma mala suerte que tuvo Anders Lind en marzo de 2021, la tuvo con una recuperación milagrosa que pasó de un diagnóstico nefasto a una recuperación milagrosa, que ha derivado en una participación épica en los Juegos Olímpicos.
La historia de este jugador de ping pong danés de 25 años empieza a torcerse en marzo de 2021, cuando el conductor del coche que iba delante suyo sufre un infarto. Sí, parece de película pero no lo es.
El vehículo de Anders Lind choca a gran velocidad contra el de delante y el deportista se rompe la espalda por varias zonas.
Foto: Instagram - @anders-lind-official
Ya en el hospital, los primeros diagnósticos no son nada optimistas. Según recogen medios daneses, el riesgo de parálisis y secuelas permanentes alcanza el 90%, lo que implicaba no volver a jugar.
Cuántas medallas tienen los países con mayores éxitos olímpicos de la historia
Es más, con apenas 22 años, la estrella emergente danesa del ping pong corría el riesgo de no volver a andar, pues tenía hasta tres vértebras rotas.
Foto: Instagram - @anders-lind-official
Por lo general, "con esos huesos rotos, pierdes la movilidad en las piernas, pero como no había dañado la médula espinal, vieron que podría volver a andar con el tiempo", comentaba el propio Anders Lind en un directo de Instagram.
Eso sí, le esperaba un año de tratamiento y rehabilitación. Obviamente, se perdió los Juegos Olímpicos de Tokio 2021, que se celebraban 4 meses después de su accidente. "Nadie pensaba que podría volver a jugar. Lloré durante una semana entera", comentaba en sus redes sociales, pero se puso manos a la obra con un trabajo lento pero constante.
Tras cuatro semanas en cama, y con la ayuda de un corsé, volvió a caminar tres meses más tarde. "Comencé caminando 20 metros al día. Luego fueron 40. Luego 60 y, en unos meses, ya podía trotar un poco".
Foto: Instagram - @anders-lind-official
Con la ayuda de un cordón metálico que le sujetaba la espalda, Anders Lind volvió a caminar y, apenas seis meses después del accidente, el danés ganó el bronce europeo, con dos varillas metálicas en su columna vertebral.
Esta dura travesía ha culminado con su presencia en los Juegos Olímpicos de París, donde venció al luso Marcos Freitas en primera ronda y donde sueña con tocar metal, más allá de las varillas que ha llevado durante meses en la espalda. Más que un milagro, un ejemplo de superación.
Foto: Instagram - @anders-lind-official