Silvio Berlusconi, el hombre que cambió el fútbol

Hay pocas personas en el mundo que hayan estado más vinculadas a un equipo de fútbol que Silvio Berlusconi con el Milan. Como el expresidente dijo en una ocasión: "El Milan es una cuestión personal". Y durante 31 años, desde 1986 hasta 2017, esa relación personal ha llevado a los rojinegros a conquistar 28 grandes victorias y, seguramente, se trate de una de las historias de amor más duraderas y felices del fútbol italiano.

Ahora, con la muerte de Berlusconi, no solo se va un gran protagonista de la política italiana, también un personaje indiscutible de la historia del deporte de este país. Hagamos un repaso de todos los títulos que se ganaron durante aquellos años que, para los aficionados al fútbol, ha sido sin duda una época dorada del fútbol italiano, en general, y del A.C. Milan, en particular.

Tras una temporada de éxito con el Parma, Berlusconi quería a Arrigo Sacchi, un entrenador que sería uno de los artífices del sueño rojinegro. El idilio del entrenador de Fusignano con el Milan empezó en 1986 y consiguió para Berlusconi sus primeros grandes éxitos deportivos.

En la imagen: Arrigo Sacchi y Ruud Gullit

Sacchi solo necesitó una temporada en el banquillo rojinegro para que llegara el primer éxito: el Milan consigue la liga 1987-88, la primera de la gestión de Berlusconi.

Barcelona, 24 de mayo de 1989: el Milan gana por 4-0 al Steaua de Bucarest con dos dobletes de Ruud Gullit y Marco Van Basten, ganando así la Champions de la temporada 1988/89.

Fueron los holandeses (Rijkaard, Gullit y Van Basten) los que lideraron al Milan de Berlusconi en aquella época, consiguiendo también ganar la Supercopa italiana contra el Sampdoria por 3 a 1.

Los triunfos del Milan de Berlusconi continuaron llegando en la siguiente temporada 1989/90, cuando el equipo italiano vence al Barcelona en la Supercopa de Europa.

Otra de las victorias internacionales del equipo presidido por Berlusconi llegó en diciembre de ese mismo año: en Tokio, el Milan gana la Copa Intercontinental.

En 1990 los rojinegros consiguieron su segunda Copa de Europa, gracias al gol de Rijkaard contra el Benfica en Viena.

Y fueron otros dos goles provenientes del ala holandesa del Milan los que inclinaron la balanza en la Supercopa italiana de ese año: Gullit y Rijkaard conquistaron la portería del Sampdoria y consiguieron que el club rojinegro levantara el ansiado trofeo.

Una vez más en Tokio, el Milan de Berlusconi está a punto de conseguir en diciembre de 1990 otra victoria: el equipo se hace con su segunda Copa Intercontinental ganando en la final contra el club Olimpia Asuncion.

Se abren entonces las puertas de la selección internacional para Arrigo Sacchi y sustituyéndolo como nuevo entrenador del club rojinegro llega otro grande: Fabio Capello.

En 1992, bajo las indicaciones de Fabio Capello, el sueño del A.C. Milan continúa: el equipo se lleva la segunda liga para el club de Berlusconi.

Tras ganar 2-1 al Parma, el Milan vuelve a conseguir una vez más la Supercopa italiana.

Aunque no gana la Champions League (cuya victoria fue ese año para el Marsella), en la temporada 1992/93 el club consigue de nuevo el título de la liga, el ansiado scudetto.

En ese 1993, la Supercopa de Italia se jugará por primera vez en el extranjero, en Washington, y la volverá a ganar el Milan, gracias al 1-0 de Marco Simone (en la foto) contra el Torino F.C.

A lo largo de 929 minutos de campeonato en la temporada 1993/94, la portería custodiada por Sebastiano Rossi es prácticamente una fortaleza inexpugnable. Gracias a su magnífica competición aquel año, el Milan de Berlusconi gana su decimocuarta liga.

El A.C. Milan gana el famoso scudetto, pero también consigue otro gran título: la Champions League. Esta vez tras una final emocionante contra el Barcelona disputada en Atenas en la que los rojinegros ganaron por 4 goles a 0.

Fue ese año, en 1994, cuando bajo la dirección de Berlusconi, el Milan se lleva por tercera vez consecutiva la Supercopa de Italia.

Entrenados por Capello, el Milan se hace con el título de la Supercopa de la UEFA contra el Arsenal en febrero de 1995. Sin embargo, no conseguirá la Champions League de la temporada tras una derrota en la final contra el Ajax.

Aunque el A.C. Milan se recuperará pronto de la derrota, ganando de nuevo el título de liga en la temporada 1995/96.

Al banquillo rojinegro llega otro técnico histórico, Alberto Zaccheroni, que pondrá fin a dos años de parón tras el último scudetto conseguido, ganando el título de la Serie A italiana en la temporada 1998/99. Sin embargo, ese fue el único éxito conseguido por el entrenador.

Cuando en 2001, Alberto Zaccheroni es sustituido por Carlo Ancelotti, la historia cambia radicalmente.

El 28 de mayo de 2003, en una final italiana contra la Juventus, el Milan gana la Copa de Europa.

En la vitrina de trofeos del A.C. Milan solo faltaba la Copa de Italia que, tras el éxito en Champions, llegó también con Ancelotti.

Pero el Milan de 2003 parece incansable. Gracias al gol de Shevchenko, el equipo se hace con su cuarta Supercopa de la UEFA el 29 de agosto.

Guiados por Ancelotti, el club italiano consigue su decimoséptimo título de liga en la temporada 2003/04, el séptimo desde que Silvio Berlusconi fuera presidente del Milan.

La última vez que los rojinegros levantaron la Supercopa italiana fue en 1994. El 21 de agosto consiguieron el trofeo tras vencer a la Lazio 3-0.

En la final de Atenas del 23 de mayo de 2007, el Milan de Berlusconi se venga de la final perdida tres años antes y consigue (de nuevo) la Champions League.

La Supercopa de la UEFA de 2007 supone también un nuevo récord para el A.C. Milan: gracias a su victoria contra el Sevilla, el club alcanza al Real Madrid y al Barcelona y se convierte en el equipo que más veces había ganado el título con 5 trofeos.

La ciudad de Yokohama es el escenario de un nuevo éxito del A.C. Milan: el equipo consigue el Mundial de Clubes de 2007 (la nueva versión de la Copa Intercontinental).

Tendrán que pasar unos 4 años antes de que se produjera otro éxito rojinegro. Tras tener a Leonardo Araújo como entrenador, llega al banquillo del Milan Massimiliano Allegri y con él, el decimoctavo título de la Serie A italiana.

El 6 de agosto de 2011 volvió de nuevo a las vitrinas del Milan la Supercopa italiana, ganada en la ciudad de Pechino contra el Inter de Milán por 2 goles a 1.

Desde 2011, la afición del A.C. Milan tuvo que esperar casi 6 años para volver a ver a su equipo ganar otro título. El 23 de diciembre de 2016, un poco antes del día de Navidad, el Milan ganó de nuevo la Supercopa de Italia, la última de los 31 años de presidencia de Silvio Berlusconi.