Más de 100.000 euros en multas sólo en NYC: así abusan los diplomáticos rusos de su inmunidad

La diplomacia probablemente esté más cerca de ser un arte que una ciencia exacta. Un baile entre naciones que requiere delicadeza, instinto y un poco de suerte. Sin embargo, fuera de horario, los diplomáticos pueden ser demasiado humanos.

La inmunidad diplomática significa que los representantes de una nación determinada son inmunes a procesos penales y demandas civiles por parte de las autoridades locales de un país anfitrión.

Para delitos graves, como el homicidio, el país de origen puede suspender la inmunidad diplomática. Sin embargo, a veces un delito es demasiado insignificante para las autoridades nacionales y es más sencillo dejarlo pasar.

Esto es particularmente atroz si su país de origen se ha convertido en un paria internacional después de iniciar una operación militar especial contra su vecino, y ya no le importa ser amable con sus anfitriones. Pero podría ser cualquiera.

Según NBC News, los diplomáticos rusos en la ciudad de Nueva York han acumulado más de 100.000 dólares estadounidenses (unos 90.000 euros) en multas de estacionamiento impagadas desde 2003.

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La situación se volvió tan grave que el Departamento de Estado de Estados Unidos intervino, declarando que consideraba suspender en el futuro cualquier matrícula diplomática a los vehículos oficiales de la Federación Rusa hasta que pagaran sus multas.

En total, los países miembros de las Naciones Unidas han acumulado más de 16 millones de dólares estadounidenses en multas de tráfico. La mayoría de ellas por violaciones anteriores a 2002, cuando las leyes sobre vehículos diplomáticos se volvieron más estrictas en la ciudad de Nueva York.

La ciudad de Nueva York no es el único lugar que enfrenta problemas con los diplomáticos rusos.

Según el diario británico The Guardian, el Departamento de Asuntos Exteriores y Comercio de Australia está cobrando el equivalente a 50.000 dólares estadounidenses (45.000 euros) en multas de estacionamiento de diplomáticos rusos desde 2007.

El Canal 9 de Australia informó que sólo Rusia debe casi la mitad de las multas de estacionamiento diplomáticas impagadas en el país.

Imagen: blurblock07 / Unsplash

Este no es el único problema que tienen las autoridades australianas con los diplomáticos rusos. En 2023, un representante del gobierno de Moscú ocupó durante algunas semanas en un terreno cerca del parlamento australiano en Canberra.

El hombre, protegido por inmunidad diplomática, ocupaba un terreno que originalmente había sido arrendado para construir una nueva embajada rusa pero que luego fue revocado por el Tribunal Superior de Australia, alegando preocupaciones de seguridad.

En la imagen: diplomático ruso abandonando el controvertido terreno.

The Guardian destaca que Aleksey Pavlovsky, el embajador ruso en Australia en ese momento, denunció que le arrojaran una zarigüeya muerta en los terrenos de la actual embajada por encima de la valla.

Imagen: rwlinder / Unsplash

Mientras tanto, el South China Morning Post informó que los medios japoneses afirman que los vehículos con matrícula diplomática rusa han acumulado más de 2.300 multas de estacionamiento impagadas en cinco años.

Las autoridades japonesas afirmaron que el gobierno dejaría de conceder excepciones al impuesto a la gasolina a los reincidentes en delitos diplomáticos.

En Japón, Australia, Estados Unidos y otros lugares, un diplomático debe ser representante de su propia nación en un país anfitrión. Sin embargo, al ver la actitud de las personas que dedican su vida y sus carreras a las relaciones internacionales, surge la pregunta de qué representan exactamente.

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