Grave acusación a Rusia: Moscú podría estar detrás de esta campaña global de sabotaje
El sitio web de noticias políticas Politico informa que el primer ministro polaco, Donald Tusk, ha acusado a Rusia de planifica una serie de ataques terroristas contra aerolíneas de todo el mundo.
“Sólo puedo confirmar que Rusia planeó actos de terrorismo aéreo, no sólo contra Polonia, sino contra aerolíneas de todo el mundo”, declaró Tusk, citado por Politico.
Según Politico, el primer ministro polaco se reunió con el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky en enero cuando hizo estas declaraciones incendiarias. Sin embargo, las sospechas de una campaña global de sabotaje existen desde hace tiempo.
El New York Times revela que, en 2024, cargamentos de apariencia inocente comenzaron a incendiarse en aeropuertos de Alemania, Reino Unido y Polonia, y la inteligencia occidental tenía pocas dudas de que el responsable era el Kremlin.
Los funcionarios de la Casa Blanca obtuvieron en agosto información que insinuaba que esto era parte de un plan de Moscú para llevar la guerra de Ucrania a Estados Unidos.
Según The New York Times, la Casa Blanca de Biden envió una advertencia al Kremlin a través de canales extraoficiales, exigiendo a Moscú que detuvieran sus actividades o serían acusados de facilitar el terrorismo.
El New York Times señala que no se sabe hasta qué punto el presidente ruso, Vladímir Putin, está detrás de estas operaciones, o si las mismas se llevan a cabo sin su conocimiento.
Mientras tanto, Politico destaca que Rusia ha sido acusada repetidamente de llevar a cabo una campaña de guerra híbrida contra las naciones europeas, saboteando el transporte y las comunicaciones.
NBC News escribe que Moscú era el principal sospechoso de dañar o cortar importantes cables submarinos que conectan energía y comunicaciones a través del Mar Báltico.
“Tres casos en un año no pueden ser una coincidencia”, declaró el presidente finlandés, Alexander Stubb, después de que el Estlink 2 de Finlandia sufriera daños en circunstancias sospechosas el 25 de diciembre.
Finlandia ha estado investigando un petrolero ruso que fue incautado después del incidente, que podría haber estado arrastrando su ancla por el suelo marino.
El barco ha sido descrito como parte de la “flota en la sombra” de Rusia, que contrabandea mercancías y navega eludiendo las sanciones occidentales.
Según Politico, el ministro de Transporte checo, Martin Kupka, afirma que se han llevado a cabo “miles de intentos” de sabotear los sistemas ferroviarios europeos. El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, calificó estas acusaciones de “infundadas”.
Politico destaca que Rusia también fue acusada de derribar un avión de Azerbaijani Airlines que volaba entre Bakú, la capital del país, y la ciudad rusa de Grozni, estrellándose en Kazajistán.
Putin se disculpó por el accidente aéreo de Azerbaijani Airlines, pero sin admitir directamente la responsabilidad de Rusia en el incidente.
El New York Times afirma que Rusia está recurriendo al sabotaje con la esperanza de agotar el apoyo de Ucrania sin una confrontación frontal con los miembros de la OTAN.
Como escribe The New York Time, esta guerra en la sombra está generando preocupación en Europa Occidental y poniendo fin al período de paz que ha definido al continente desde el fin de la Guerra Fría.