Se parece a un famoso actor de Hollywood y su historia viene con polémica: quién es Antonis Nikopolidis
Antonis Nikopolidis es algo así como un héroe de culto del fútbol. El exportero se hizo mundialmente famoso gracias a su victoria con la selección griega en la Eurocopa de 2004, pero parece que a lo largo de su carrera el futbolista tuvo una relación un tanto ambigua con su patria. Veamos cómo fue la brillante trayectoria de este enigmático jugador y con qué famoso actor y director de Hollywood le comparan.
Empecemos por el principio. Nikopolidis nació el 14 de enero de 1971 en Arta, Grecia, y desde muy joven se unió a su club local, el Anagennisi Arta, y despertó el interés de los grandes del fútbol griego.
En 1989, el jugador se trasladó a Atenas para jugar con el Panathinaikos, uno de los clubs más importantes de la capital griega. Fue el principio de una larga y fructífera relación, pero una que acabaría con un sabor amargo.
Síguenos y descubre cada día contenidos que te interesan
Esa misma temporada, Nikopolidis debutó con el equipo, aunque el jugador tuvo algunos problemas para mantenerse como el portero titular del Panathinaikos hasta la temporada 1997/98. Sin embargo, su tiempo en el club fue uno de mucho éxito, logrando ganar cinco títulos y cinco copas.
Justo antes de la Euro 2004, Nikopolidis se enfrentó a la gestión del Panathinaikos, con el objetivo de demandar una subida de sueldo.
Según The Sportsman, se rumoreaba por aquel entonces también que el portero había sido contactado por el equipo rivalísimo del club, el Olympiacos, que sí estaba dispuesto a pagarle más dinero. Finalmente, el jugador firmó con el equipo el 1 de julio de 2004, dejando a los fans del Panathinaikos devastados.
Sin embargo, justo en aquella época, Nikopolidis, de 34 años, estaba centrado en su compromiso con el equipo nacional de Grecia, que iba a disputar la Euro 2004, celebrada en Portugal.
No gustará al F.C. Barcelona: todos se fijan en esto tras el último partido del Real Madrid
Los griegos viajaron a Portugal sin muchas esperanzas, y nadie daba lo más mínimo por la victoria del equipo en el torneo. Sin embargo, Nikopolidis y sus compatriotas demostraron a todos su valía y consiguieron llegar a la final, batiendo a Francia y a República Checa por el camino.
El obstáculo final para Nikopolidis y los griegos era Portugal, el anfitrión, que contaba con un joven Cristiano Ronaldo entre sus filas. Los dos países ya se habían enfrentado en la fase de grupos, y Grecia había ganado al equipo luso por 2 a 1; la victoria de los griegos llegó también en la final. Fue el cabezazo de Angelos Charisteas quien hizo estallar la euforia de los griegos.
Nikopolidis jugó también un papel clave en el éxito de su selección nacional, logrando guardar su portería y dejándola, prácticamente, a cero. Él y sus compatriotas fueron recibidos en su país como auténticos héroes griegos.
Síguenos y descubre cada día contenidos que te interesan
Tras el campeonato, Nikopolidis se centró en su próxima aventura en el Olympiacos, donde su llegada se hizo notar en seguida. El futbolista ayudó al equipo a conseguir el doblete en la liga griega, algo que ya había conseguido con el Panathinaikos y que acabó de consagrarlo como una leyenda del fútbol griego.
Nikopolidis finalmente se retiró como jugador con el Olympiacos, tras ganar seis títulos y cuatro copas, y conseguir el estatus de leyenda del fútbol.
Sus logros fueron más testimonio aún de su estatus como leyenda cuando Nikopolidis fue incluido por la Federación Internacional de Historia y Estadística de Fútbol en la lista de los mejores porteros del mundo de la década de 2001a 2010, en el puesto 23.
Aparte de sus habilidades como futbolista, uno de los aspectos que más llamó la atención sobre el portero era su parecido con el actor George Clooney. Definitivamente, hay algo en su pelo plateado que nos recuerda a la estrella de Hollywood.
Tras colgar las botas, Nikopolidis volvió al mundo del fútbol como asistente y entrenador del primer equipo del Olympiacos; también jugó un papel importante en la academia para jóvenes del club. Nikopolidis también trabajó para el equipo sub-21 y el Proodeftiki.
Una de las curiosidades más sonadas de la carrera del futbolista es que Nikopolidis, mientras fue jugador para el Olympiacos, aceptó un trabajo de funcionario público como jardinero, según recoge The Sportsman.
De acuerdo con la ley griega, el jugador podía aceptar ese trabajo, aunque las noticias no fueron muy bien recibidas en el país, que estaba en el peor momento de su crisis económica.
Nikopolidis hizo unas declaraciones al respecto en la página web del Olympiacos: "El gobierno da la oportunidad a los deportistas de éxito de trabajar en un empleo público. Desde 2005, puedo hacer uso de este derecho por haberme convertido en campeón de Europa en Portugal en 2004. Muchos de mis compañeros pueden usar este derecho también. Según la ley, tengo derecho a aceptar o rechazar esta plaza en dos semanas. Lo haré e informaré a los ciudadanos de los motivos de mi decisión".
El exfutbolista griego también se comprometió con la problemática de la llegada de refugiados al país, y ayudó a fundar un equipo de fútbol para refugiados en Grecia, según TRT World. De esta forma, Antonis Nikopolidis ha buscado mejorar un poco nuestra sociedad, después de una carrera de éxito, y algo de polémica, que dividió opiniones entre los griegos.
Síguenos y descubre cada día contenidos que te interesan