Laporta sigue engordando el “escándalo” del Madrid vs. Barça: polémica petición del presidente culé

Como suele ser habitual desde tiempos inmemoriales, el 'Clásico' entre Real Madrid y F.C. Barcelona no terminó, ni mucho menos, con el pitido final del árbitro después de los 90 minutos de partido. La polémica por el penalti a Lucas Vázquez y, sobre todo, por el gol fantasma de Lamine Yamal, ya ha generado un tedioso debate que Joan Laporta no está dispuesto a cerrar.

En su año más complicado por el escándalo del 'Caso Negreira' -a lo que hay que sumar los problemas económicos del club catalán y una campaña deportiva para olvidar bajo la batuta de Xavi Hernández-, el presidente del Barça no ha querido cejar en su empeño de acusar a su eterno rival de vivir a costa de favores arbitrales, mientras a ellos los estarían perjudicando.

Al 'Clásico' del 21 de abril en el Santiago Bernabéu, los culés llegaban con la posibilidad de ganar y colocarse a 5 puntos del Real Madrid para seguir peleando por el título de Liga, pero, finalmente, con el tanto de Jude Bellingham en el minuto 90, cayeron derrotados, colocando a 11 puntos y poniendo prácticamente en bandeja el campeonato al conjunto blanco.

Todo ello tras un primer tiempo que finalizó con empate 1-1, con un tanto por un penalti muy discutido sobre Lucas Vázquez y un gol fantasma de Yamal que no subió al marcador y del que no hay evidencias que traspasara la línea de gol. Razones suficientes para provocar la ira de Joan Laporta, quien ya ha advertido que pedirá la repetición del partido.

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Algo que el dirigente culé no ha dicho en medio de algún berrinche a causa del calentón por la derrota, sino poniéndose delante de las cámaras para emitir un discurso institucional en el que ha criticado el "mal uso del VAR", además de exigir que se vuelva a disputar este 'Clásico'.

"Como presidente del Barça quiero transmitir la insatisfacción que produce que, un día después de uno de los partidos más importantes del fútbol mundial, el mal uso de una herramienta como es el VAR nos esté marcando la agenda", comenzaba diciendo Laporta en su inesperado discurso.

El presidente del Barça criticó especialmente al VAR, porque, según sus palabras, "sigue provocando confusión y criterios contradictorios según los partidos y según los equipos", además de que, apuntó, "infravalora la competición porque debe ayudar a que sea más justa y no al revés". Una crítica que trasladó a lo sucedido en el partido…

"Hubo diversas jugadas discutibles", dijo centrándose directamente en el tema del gol fantasma, sobre la que señaló que "como club queremos tener la seguridad de esa acción, por lo que requeriremos de manera inmediata al Comité Técnico de Árbitros (CTA) y a la Federación española de fútbol (RFEF) para que nos faciliten todas las imágenes y audios de esa jugada".

En ese sentido, añadió Laporta, "si el club entiende que se produjo un error en la interpretación de la jugada, que es que lo pensamos, pondremos en marcha todas las actuaciones oportunas sin descartar, evidentemente, las acciones judiciales que sean necesarias. En caso de confirmarse de que fuera un gol legal pediremos la repetición del partido".

Sus palabras vienen a elevar el tono contra el sistema arbitral, representado precisamente por el CTA, que ya ha mostrado sus cartas ante las críticas recibidas mostrando los audios de la sala VAR, donde, tras la revisión de varias imágenes en torno a la jugada, concluían que el gol no debía subir al marcador al no tener evidencias de que el balón traspasara la línea de gol.

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Sobre la reclamación de Joan Laporta existe un precedente en un partido de la liga belga entre el Anderlecht y el Genk de la actual temporada 2023-2024, en el que vencieron los primeros por 2-1 y el VAR anuló un tanto a los segundos. En un principio, el partido volvería a jugarse, pero, finalmente, el Tribunal de Arbitraje Deportivo de Bélgica (CBAS) revocó la decisión.

Junto a sus críticas, las de algún jugador del Barça, como el guardameta Marc-André ter Stegen, que dijo tras el partido que "es una vergüenza que no haya tecnología de la línea de gol" o del técnico Xavi Hernández, que habló de "injusticia total".

Aunque destaca especialmente la publicación en X (antes Twitter) del director de gabinete de Laporta, Jordi Finestres, quien no dudo en evocar el franquismo, como hace meses ya hizo su presidente en otro de sus discursos de puro fervor antimadridista en medio de la tormenta por el ‘Caso Negreira’.

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"Si con 40 cámaras y con VAR vivimos escándalos como el de ayer, no puedo imaginarme lo que sufrieron las generaciones de barcelonistas en las décadas del franquismo, sin TV o con 2 planos generales, con una prensa bajo control y unos estamentos federativos favorables al club-estado", escribía el periodista del Barça.

No han sido los únicos y hasta han encontrado aliados en su discurso entre miembros de grandes rivales, como es el caso del político catalán Gabriel Rufián, portavoz de ERC y seguidor confeso del Espanyol, quien escribió en la red social X: "Alguien con un Motorola de 2004 sabe que esto fue gol, pero La Liga no porque patatas".

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Las palabras del dirigente azulgrana no han pasado ni mucho menos desapercibidas y en general no para bien, especialmente entre los medios de comunicación, que han sido muy críticos con él. En la Cadena SER, Manu Carreño señalaba que "es todo tan surrealista, tan esperpéntico y tan marciano, que es difícil de entender y cuesta creer que lo que ha dicho Laporta no sea un gag".

"Entiendo que es mucho mejor hablar de esto que del batacazo en la Champions y en la Liga. (…) Entiendo que hablar de todo esto es complicado, de la situación económica del club, pero de verdad creo que, aunque todavía haya gente que le compre el relato, este discurso tan tribunero y ventajista, creo que cada vez hay menos gente dentro del Barça que lo hace", añadió.

En la Cadena COPE, Juanma Castaño recalcó que "no hay una sola imagen que demuestre al cien por cien que la pelota atraviesa la línea" y apuntó que el partido no puede ni debe repetirse "porque no hubo un solo fallo técnico. Primero, porque no hay tecnología de gol en España. Segundo, porque no hubo ningún fallo".

Críticos incluso entre las filas de periodistas de corte culé, como David Sánchez, de Radio Marca, quien habló de "ridículo" de Laporta y aseguró que "no soy de los que opina que el Barcelona ha perdido títulos por los árbitros ni que ha perdido en el Bernabéu por el colegiado. Soto Grado no me parece un buen árbitro, pero en el Bernabéu, en las decisiones polémicas, yo hubiese pitado más o menos como pitó el colegiado".

Sea como sea, la polémica y el debate siguen abiertos, sobre todo, porque Joan Laporta así lo ha querido y porque le interesa. ¿Se saldrá con la suya el presidente culé o su nueva salida de tono volverá a quedar en anécdota engordando su teoría del madridismo sociológico?

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