La lista definitiva de raros deportes olímpicos que ya no lo son
Los Juegos Olímpicos son la competición deportiva del mundo al más alto nivel, con los mejores atletas participando para conseguir el mayor reconocimiento deportivo de la historia: una medalla de oro.
Sin embargo, desde el 1900, las Olimpiadas han incluido algunos de los 'deportes' más raros en los que no creerías nunca que alguien participaría y que se han considerado disciplina olímpica en algún momento de la historia. A continuación, te dejamos algunos ejemplos que te sorprenderán.
En los Juegos de París del 1900, los globos aerostáticos tuvieron su propia competición: el globo que subiera más alto y llegara más lejos ganaba. Los ganadores de la medalla de oro alcanzaron una altura de 8.558 metros y llegaron a volar desde París hasta la capital ucraniana de Kiev.
El propio nombre del deporte ya revela el sinsentido de esta disciplina. ¿Cómo puedes nadar de forma sincronizada si la única persona en la piscina eres tú mismo? A pesar de la incongruencia, en las Olimpiadas de 1984, 1988 y 1992 se pudo disfrutar de esta disciplina y Tracie Ruiz, Carolyn Waldo y Kristen Babb-Sprague ganaron la correspondiente medalla de oro.
Según GQ Sports, los participantes tenían que sumergirse bajo el agua con un salto en las Olimpiadas de 1904 en St. Louis y ver cuánto de profundo podían llegar antes de volver a la superficie minutos después. El ganador fue William Dickey, al alcanzar una distancia de 19 metros.
Los deportes de tiro han sido simbólicos en las Olimpiadas desde sus inicios, pero ninguna disciplina ha sido tan extraña como la del tiro a palomas al vuelo que se disputó en París en 1900. Más de 300 palomas fueron alcanzadas y el ganador llegó a derribar a 21 ejemplares.
La pesca deportiva sigue siendo un deporte muy popular, y según la página web de NOS Jeugdjournaal, fue una disciplina olímpica en los Juegos de París del 1900. En la competición participaron 600 personas y se pescaron más de 2.000 peces. La persona que cogió el ejemplar más grande fue Elie Lesueur.
No es tan descabellado como suena, ya que los participantes no se disparaban los unos a los otros. En esta disciplina, que estuvo incluida en las Olimpiadas de Estocolmo de 1912, los hombres participaban disparando a maniquís vestidos con chaqué.
Los deportes ecuestres han formado siempre parte de las Olimpiadas, pero el salto de longitud y de altura a caballo parece una disciplina un tanto extraña. El nombre de este deporte, que se incluyó en las Olimpiadas de París de 1900, define exactamente en qué consistía.
En los Juegos de 1900, los atletas competían en una carrera de obstáculos en la que tenían que escalar postes y nadar por debajo de barcos en el río Sena. El ganador de la medalla de oro en esta disciplina fue el australiano Fred Lane. Nosotros creemos que este año sería la ocasión perfecta para que volviera esta competición a los Juegos; y tú, ¿estás de acuerdo?