¿Qué pasó con los modernos tanques que Putin envió a Ucrania?
Los T-14 Armata rusos son los tanques de batalla principales más avanzados del Kremlin y debutaron en el campo de batalla ucraniano por primera vez en abril de 2023. Pero, ¿qué ha pasado con estos tanques? ¿Cuál ha sido su efectividad en el campo de batalla?
En abril de 2023, las informaciones de los medios estatales rusos sugerían que Vladímir Putin y los comandantes de su ejército estaban planeando desplegar los T-14 Armata por primera vez en la línea del frente de la guerra en Ucrania.
Imagen: Wiki Commons / Vitaly V. Kuzmin
El 25 de abril, RIA Novosti informó de que las Fuerzas Armadas rusas habían empezado a usar los T-14 Armata en operaciones de combate, según una "fuente informada" que habló con el medio de noticias estatal.
"Las tropas rusas han empezado a usar los últimos tanques Armata para atacar las posiciones ucranianas", explicaba la fuente, añadiendo que el papel de los tanques en el campo de batalla era limitado.
"No han participado aún de forma directa en operaciones de asalto", continuaba la fuente, antes de mencionar que los nuevos tanques habían sido reforzados con un blindaje adicional.
Las tripulaciones de los tanques rusos habrían supuestamente pasado todo 2022 aprendiendo a usar los T-14 Armata en un campo de entrenamiento en algún lugar del Dombás, según la fuente de RIA Novosti.
En enero de 2023, el Ministerio de Defensa británico señaló que Rusia estaba probablemente considerando enviar un pequeño grupo de tanques T-14 a Ucrania, tras recibir imágenes por satélite de varios Armatas en un campo de entrenamiento conocido por su "actividad predespliegue" en Ucrania.
El Ministerio de Defensa británico concluyó que cualquier despliegue de los T-14 era probablemente una "decisión de alto riesgo" que solo podría llevarse a cabo por "motivos de propaganda" por parte de Moscú.
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El principal argumento de las conclusiones del Ministerio de Defensa británico era la falta de un número importante de tanques T-14 que realmente marcara la diferencia en el campo de batalla.
El informe británico también menciona que un vehículo de un tamaño mayor tendría implicaciones adicionales en la logística y dificultades para la cadena de suministro de las fuerzas rusas, algo que ya era un problema grave en aquel momento para el ejército ruso.
"La producción probablemente está por debajo de las decenas, y no es probable que los comandantes confíen en los vehículos en el combate", escribía el Ministerio de Defensa; y esa puede ser la razón por la que los principales tanques de batalla avanzados no fueron enviados directamente a operaciones de asalto en aquel momento.
Los T-14 Armata fueron mostrados por primera vez al público en el Desfile del Día de la Victoria de 2015 en Moscú, según Jon Jackson de Newsweek, y fueron promocionados como la respuesta rusa a su competidor principal: el tanque de batalla estadounidense, M1 Abrams.
Equipados con un poderoso cañón de 125 mm, los T-14 cuentan con un diseño de torreta no tripulada que mantiene a salvo a la tripulación dentro del blindaje del vehículo, según explicaba Michael Peak de Insider, aunque, según el periodista, la armadura fina de la torreta del tanque podría hacerlo más vulnerable.
Imagen: Wiki Commons / Vitaly V. Kuzmin
Popular Mechanics señaló que los T-14 tienen un alcance de fuego incomparable y pueden llegar hasta una distancia de casi 12 km, esto es bastante útil para el papel de combate que está desempeñando el tanque actualmente, pero es poco probable que fuera muy efectivo si el T-14 se usara en un ataque ofensivo.
Imagen: Wiki Commons / Dmitriy Fomin
Si la guerra en Ucrania nos ha enseñado algo, es que los tanques principales de batalla son igual de importantes que siempre en la guerra moderna, pero también son mucho más vulnerables frente a las armas antitanques.
Las armas antitanques como la estadounidense Javelin o la de fabricación ucraniana, Stugna-P, han demostrado que las piezas multimillonarias de tecnología avanzada pueden perderse en cuestión de segundos, si no son capaces de combatir adecuadamente contra este tipo de misiles.
La efectividad de los Armata en el campo de batalla y la capacidad para marcar la diferencia en la guerra se basaría en la habilidad del tanque para defenderse a sí mismo, algo que el sistema de protección Afganite del vehículo hace muy bien, según RIA Novosti.
"No sé cuántos hay ni de qué manera los nuevos tanques rusos pueden usarse… pero creo que en cualquier caso pronto veremos cómo el Armata… se enfrenta a los Leopards y a los Abrams", escribía German Kulikovsky en Telegram cuando los T-14 fueron desplegados en Ucrania, según la traducción del Kyiv Post.
En julio, varios tanques T-14 Armata fueron supuestamente retirados de la lucha en Ucrania, de acuerdo con la información de la Agencia Rusa de Noticias, TASS, que habló con una fuente que explicó que los tanques solo estaban siendo usados por el ejército ruso en el Distrito Militar Sur para ver cómo actuaban en combate.
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"Los miembros [del batallón] del sur usan activamente los Armata en combate. Varios vehículos han participado en el combate para ver cuál sería la actuación del tanque. Tras esto, fueron retirados de la línea del frente", contaba la fuente a los reporteros de TASS.
Imagen: Wiki Commons / Vitaly V. Kuzmin
TASS también señaló que no había información oficial sobre el uso de los T-14 en la guerra contra Ucrania y que no había habido ningún testimonio de los medios de Occidente que detallara alguna batalla en la que los tanques avanzados rusos hubieran marcado la diferencia.
Imagen: Wiki Commons / Vitaly V. Kuzmin
Sin embargo, no está claro si realmente algunos de los tanques T-14 desplegados en Ucrania ha formado parte en algunas de las batallas. En septiembre de 2023, el teniente general Kyrylo Budanov, jefe del Directorio Principal de Inteligencia de Ucrania, contó en una rueda de prensa que no se había visto a ningún T-14 en Ucrania.
"No hemos visto ninguna prueba de que esa máquina se haya usado aquí", explicaba Budanov, según Business Insider; más tarde, el teniente general destacó que él creía que Rusia temía usar los tanques, ya que la captura o destrucción de los mismos podría dañar los mercados de las futuras exportaciones de Moscú.