Los hongos podrían ser la clave para lograr la sostenibilidad del planeta
Los avances tecnológicos suscitan optimismo respecto a que un hongo legendario pueda ser una solución fundamental en la lucha contra diversas formas de contaminación global.
Gran parte del entusiasmo se centra en el vasto sistema de raíces del hongo, conocido como micelio, que puede extenderse hasta 300 millas bajo tierra, interconectando plantas y árboles en una red natural impresionante.
Destacado por su capacidad para absorber y descomponer hidrocarburos, el micelio está ganando reconocimiento en el ámbito empresarial. Compañías como Ecovative lo valoran por su impacto ecológico en la fabricación de alimentos, textiles alternativos al cuero y materiales de embalaje, según informó The Washington Post.
Ecovative es una de las primeras empresas en cultivar micelio específicamente para la producción de sustitutos de carne, plástico y cuero.
Otro pionero en el campo de los hongos es MycoWorks, que convierte ingredientes básicos como aserrín, salvado, agua y micelio en materiales parecidos al cuero, el algodón y la seda.
Foto: captura de pantalla del sitio web de MycoWorks.
Los investigadores también están buscando formas de utilizar hongos para resolver una serie de problemas ambientales. Entre sus objetivos se encuentran eliminar toxinas, devorar plásticos y mejorar la calidad de nuestro suelo.
A medida que la contaminación plástica crece, la posibilidad de que un hongo pueda descomponerla puede parecer un milagro. Sin embargo, científicos alemanes han propuesto que esta solución podría ser viable, según Reuters.
Estos científicos han identificado un hongo capaz de descomponer plástico, aunque enfatizan que solo sería una solución parcial y que es crucial desarrollar alternativas de embalaje para abordar el problema del plástico de manera efectiva.
La investigación realizada en el lago Stechlin, al noreste de Alemania, reveló cómo los microhongos prosperan en ciertos plásticos, que no tienen otra fuente de carbono de la cual alimentarse.
Hans-Peter Grossart, jefe del grupo de investigación del Instituto Leibniz de Ecología de Agua Dulce y Pesca Continental, declaró a Reuters TV que algunos hongos podrían descomponer los polímeros sintéticos ultra resistentes.
Las fibras de hongos también pueden acelerar la descomposición de restos humanos, según ha descubierto Loop, una empresa holandesa que vende ataúdes.
Foto: captura de pantalla del sitio web de Loop
Los ataúdes de Loop están hechos de hongos y fibras de cáñamo que se descomponen en semanas; el hongo se alimenta de los restos humanos.
Foto: captura de pantalla del sitio web de Loop
Según Mushroom Council, los hongos son la clave para un futuro más sostenible, ya que para cultivarlos se necesita un mínimo de agua, electricidad y tierra. ¡Mágico!
Foto: captura de pantalla del sitio web de Mushroom Council.