Intento de asesinato de político de la derecha española
Jueves 9 de noviembre. El ex presidente del Partido Popular en Cataluña y después fundador de Vox, Alejo Vidal-Quadras, figura de referencia de la derecha española, es baleado en el rostro. Sucede en pleno centro de Madrid y en un momento político delicado: en medio de convulsas protestas derechistas contra la amnistía pactada entre el PSOE y los independentistas catalanes.
En la calle Núñez de Balboa, icónica arteria del convervadurismo madrileño, una motocicleta con dos hombres se detiene. Uno de ellos baja y dispara su pistola.
La bala entra y sale de su rostro destrozando la mandíbula a Vidal-Quadras. Los atacantes escapan a toda velocidad.
Horas más tarde, un parte médico recogido por el diario El País comunica que Vidal-Quadras "se encuentra estable y sin riesgo vital".
Las primeras informaciones hablan de un atraco pero, en seguida, se descarta esa hipótesis. El modo en que sucedió todo no encaja con un robo y sí más con la actuación de sicarios.
En redes sociales, sin fundamento alguno, comienza a extenderse desde la extrema derecha la idea de que puede haber sido un atentado político motivado por la posición de Vidal-Quadras contra la amnistía. El ambiente político se caldea en España.
Pero, según recoge el diario El Mundo, Vidal-Quadras habla desde el hospital con la policía y acusa a Irán de haberle atacado por sus vínculos con la oposición de ese país.
El diario El País tituló en su momento: "Vox se fundó con un millón de euros del exilio iraní". En aquellos días, Vidal-Quadras era dirigente de la formación, aunque luego la abandonó.
Algunos medios apuntaron a que en la localidad de Fuenlabrada, a pocos kilómetros de Madrid, se encontró una motocicleta calcinada que podría haberse utilizado en el ataque.
El ataque a Vidal-Quadras acrecienta la tensión en España, donde desde hace varios días cada noche hay manifestaciones contra la amnistía a indendentistas catalanes. Manifestaciones muy violentas.
Alejo Vidal-Quadras tiene 78 años y fue el gran dirigente de la derecha española en Cataluña. Pero abandonó el PP por entender que no era suficientemente firme con los independentistas catalanes.
La policía sigue investigando. La pista iraní está ahí pero no se descartan otras posibilidades.