Famosos que han estado en bancarrota
'El Príncipe de Bel-Air' salvó a Will Smith de una deuda millonaria. Su álbum 'Parents Just Don't Understand' arrasó en 1988 y el artista ganó mucho dinero pero no lo declaró y el fisco le reclamó 2,8 millones de dólares. A punto de declararse en quiebra, el actor firmó su contrato con NBC para protagonizar 'The Fresh Prince of Bel-Air'. Durante las tres primeras temporadas, Hacienda se quedó el 70% de su salario.
Al contrario que muchos compañeros, Chris Pratt supo lo que era la ruina antes de triunfar en Hollywood. Dormía en una furgoneta o en la playa y trabajaba de camarero para pagarse la comida y la gasolina. Fue, precisamente, trabajando de camarero cuando Rae Dawn Chong le ofreció un papel en 'Cursed: Part III', su primer papel en cine
Su repentino fallecimiento en 2009 sirvió para descubrir una deuda que rozaba los 500 millones de dólares. Su famoso rancho de Neverland estaba a punto de ser embargado. El motivo de esta situación fueron los tremendos gastos que generaba el Rey del Pop, que le llevaron a pedir préstamos que no terminó de pagar. Sus herederos pagaron la deuda fácilmente gracias al patrimonio heredado.
La musa de Hollywood en los 80 invirtió 20 millones de dólares, en 1993, en un grupo cuyo proyecto iba a crear un complejo turístico, además de un centro de producción de cine y televisión en Braselton, Georgia. El proyecto fracasó y la actriz perdió todo lo invertido en 1993. Para rematar su situación económica, Line Pictures la demandó por incumplir un contrato verbal para protagonizar la película 'Boxin Helena'. Alcanzó un acuerdo con la productora, en 1995, antes de afrontar un juicio en el que le pedían 8,1 millones de dólares.
En un momento de su carrera, Johnny Depp llegó a ganar 30 millones de dólares por película. Un patrimonio tremendo que se le fue en mansiones, coches, islas, fiestas y un estilo de vida insostenible. En 2017 demandó a su equipo financiero, acusándoles de dejarle quebrar. Cuando le recordaron que gastaba 33.000 dólares al mes en vino, el actor se indignó porque le parecía poco dinero en vino. Genio y figura...
Pasó de ser una niña Disney en auge a una estrella venida a menos con fama (bien ganada) de fiestera. Así, el patrimonio de LiLo pasó de ser millonario a unos exiguos 800.000 dólares en 2018. Para remontar, la actriz decidió lanzar un disco que resultó ser, para sorpresa de nadie, un sonoro fracaso.
Si bien Donald Trump nunca se ha declaro en bancarrota personalmente, sí que lo ha hecho hasta seis veces con sus empresas, según recoge Politifact. Su Casino Taj Mahal en Atlantic City fue el primero en caer en 1991. Desde entonces, hasta 2009, casinos, hoteles y complejos turísticos del magnate corrieron la misma suerte. "Básicamente, he usado las leyes del país a mi favor, como muchos otros en la cima del mundo empresarial", aseguró a Forbes.
La estrella infantil de los 80 acusó el duro golpe de perder la fama que le diera 'Padres Forzosos' y se escudó en el abuso de todo tipo de sustancias. Llegó a acumular 53.000 dólares de deuda con el fisco, a lo que se suma la manutención de sus dos hijos y los gastos de sus cuatro divorcios. Cuando fue contratada para protagonizar 'Madres Forzosas', la actriz estaba en la ruina.
Corría el año 2006 cuando el mítico Blade se declaró en bancarrota. Meses más tarde, fue declarado culpable de fraude fiscal y de evadir 12 millones de dólares en impuestos. Fue condenado tres años en prisión por este delito.
El rapero y actor, un referente musical del siglo XXI, llegó a 2015 con una deuda de 32,5 millones de dólares que le obligó a declararse en quiebra. La causa de la deuda venía por varias demandas recibidas, así como atrasos en la manutención de sus hijos. Tres años más tarde, se dijo que 50 Cent era millonario gracias a 700 bitcoins con los que le pagaron un álbum pero el propio cantante lo desmintió.
A pesar de lo que pueda parecer, el actor ha habido años en los que ha llegado a ingresar 40 millones de dólares por sus trabajos en Hollywood. A pesar de ello, tiene fama de manirroto y entre 1996 y 2011 se estima que gastó 150 millones de dólares. El actor llegó a tener una mansión en Malibú, un castillo medieval, el castillo Midford, incluso una isla en el archipiélago de Exuma. Sus 15 propiedades le llevaron a declararse en quiebra y tener que aceptar papeles menores en los últimos años.
Brendan Fraser atravesó consecutivas malas rachas en su carrera y hacía papeles que no eran tan brilantes como cuando fue George de la Jungla. Según se publicó en diversos medios, Fraser tiene que pagar 900.000 dólares anuales de manutención para los tres hijos que tuvo con su ex esposa Afton Smith. La buena noticia es que la vida de Fraser ha cambiado tras recibir su primer Oscar como Mejor Actor por la película ‘The Whale’ (La Ballena, 2022).
"He perdido más dinero del que es posible", afirmaba el actor en 2015 a Vanity Fair. Un avión privado, 150 caballos o hasta 100.000 dólares en peluquines durante los 80 fueron algunos de sus excesos. A esto se sumó su divorcio de Loni Anderson, en 1994, a quien tuvo que pagar 2 millones de dólares, además de una pensión mensual de 47.000 dólares. Se declaró en quiebra en 1996 con una deuda de 10 millones de dólares
En 2009 tuvo que declararse en bancarrota al no poder afrontar el pago de los impuestos que debía y las dos hipotecas solicitadas. Este hecho se repitió en 2017, tras pasar seis años sin pagar la hipoteca, por lo que perdió su casa. Además, pasó cinco años en libertad condicional tras no pagar impuestos durante tres años consecutivos. Vamos, el contribuyente del año.
Cuesta creer que el creador del mayor imperio cinematográfico y audiovisual de la actualidad tuviera problemas económicos, pero sus primeras producciones no funcionaron todo lo bien que se esperaba. Todo cambió cuando Mickey Mouse llegó a su vida.