Marcela Topor, la mujer de Puigdemont que cree en la magia y predice el futuro

Pese a haber nacido en 1976 en Rumanía (concretamente en la ciudad de Vaslui), Marcela Topor va a estar siempre unida a la historia de Cataluña, pues se trata nada menos que de la esposa de Carles Puigdemont y, en consiguiente, ex primera dama catalana (lo fue entre enero de 2016 y octubre de 2017).

De ella se han publicado infinidad de informaciones. Una de las más curiosas, que cree en la adivinación, la magia y es amante del mundo esoterismo, algo que, al parecer, comparte con el propio Puigdemont, de quien también se ha dicho (concretamente en medios como La Razón) que le gustaba vestirse de nigromante y leer libros sobre magia.

Pero en algunos aspectos, Marcela Topor sigue siendo una gran desconocida para muchas y muchos.

Marcela Topor o Mars, como la conocen sus amigos, actualmente es editora del medio de noticias en inglés Catalonia Today y sigue dirigiendo y presentando un programa de televisión de la Red de Televisiones Locales (La Xarxa) llamado 'The Weekly Mag’. Además, en el pasado hemos podido verla colaborando en ‘El Punt Avui’ o como presentadora del programa de entrevistas en inglés ‘Catalan Connections’, en el que preguntaba por su vidas a personas extranjeras que residían en Cataluña.

Muchos de estos trabajos han estado siempre en el punto de mira, por sus altos sueldos, a costa de las subvenciones que le entrega la Diputación de Barcelona, pero Marcela Topor ha ido saliendo indemne…

Lo de que presente en inglés no es causal. No en vano, estudió filología inglesa en la Universidad Alexandru Ioan Cuza, unos estudios que compaginaba con faceta de actriz en una compañía de teatro con la que pudo viajar por media Europa.

Pero… ¿cómo llegó Marcela Topor a Cataluña y cómo se inició su relación con Puigdemont? Fue precisamente su amor por el teatro el que le permitió conocer al que sería el presidente número 130 de la Generalitat. Ocurrió en 1998, en unos de los viajes que ella hizo a Cataluña con Ludic Theatre, la compañía de teatro con la que actuaba, para participar en la primera edición del Festival Internacional de Teatro Amateur. La obra con la que debutaron llevaba por nombre ‘El rey se muere’.

Se casaron en el 2000, primero en Roses mediante una celebración laica, y después en Rumanía, en el monasterio de Maramures, por el rito ortodoxo. Y fruto de esa unión nacieron sus dos hijas: Magalí y Maria.

Cuando llegó a Cataluña, primero ejerció como traductora en la Agencia Catalana de Noticias (que dirigía entonces el propio Carles Puigdemont) y más tarde inició su carrera actual como periodista y presentadora.

Tras la declaración unilateral de independencia del 1 de octubre de 2017, que provocó la huida a Bélgica de Puigdemont, su esposa ha estado a caballo entre Waterloo y Girona, donde continúa viviendo junto a sus hijas en el chalet familiar que la pareja compró en 2003 en la Urbanización Golf II de Sant Julià de Ramis, a las afueras de Girona.

Cuentan de ella que, dado su interés por el mundo del ocultismo, siempre lleva consigo amuletos para protegerse a ella y a su familia y que predice el futuro. ¿Sabrá ya lo que le depara a su marido o habrá que preguntar mejor a Pedro Sánchez?

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