El anuncio censurado de Madonna que costó 5 millones de dólares

Madonna se ha ganado, por derecho propio, ser considerada como la ‘Reina del Pop’, todo ello de la mano de una carrera, eso sí, en la que también ha sembrado la polémica y ha agitado a diversos grupos de diversa índole en distintos momentos de su trayectoria.

Lo hizo entre los grupos pro-vida y en las altas esferas de la iglesia católica con su canción ‘Papa Don’t Preach’ en 1986. El Papa Juan Pablo II la excomulgó solo un año después (la primera de un total de tres) y hasta la MTV y otras cadenas musicales la censuraron por lo explícito de su videoclip ‘The Inmaculate Collection’ (1990).

Son solo algunos ejemplos, aunque hay más, como es el caso bien conocido de aquel anuncio que protagonizaba para Pepsi y en el que presentaba al mundo su conocido superéxito ‘Like a Prayer’, pero que fue censurado de forma fulminante.

Imagen: Pepsi

Corría el año 1989 cuando la marca de refrescos firmó un contrato con la cantante para que protagonizase un anuncio titulado ‘Make a wish’(pide un deseo) con su nueva canción ‘Like a Prayer’, una estrategia que ya les había funcionado con Michael Jackson y Whitney Houston.

El anuncio de por sí tenía poco de polémico, pues simplemente se podía ver a la artista sentada en un sillón disfrutando de sus recuerdos. El problema vino de la canción escogida y del videoclip con la que fue presentada al mundo.

En el videoclip oficial de ‘Like a Prayer’ se podían ver cruces ardiendo y escenas eróticas dentro de una iglesia entre Madonna y un santo afroamericano que vuelve a la vida tras ser acariciado y besado por ella, todo ello con una fuerte simbología cristiana de fondo y hasta un coro de gospel.

Pero su trasfondo iba mucho más allá de eso. Era también una denuncia contra el racismo mostrando cómo, después de que un grupo de hombres blancos agredieran a una mujer, la Policía detenía al único que había intentado socorrerla, un hombre afroamericano.

El spot publicitario de Pepsi se emitió por primera vez durante ‘La hora de Bill Cosby (‘The Cosby Show’ / ‘El Show de Bill Cosby’)y, al día siguiente, la MTV estrenó el videoclip. Y fue entonces cuando saltó la polémica…

Numerosas asociaciones cristianas de Estados Unidos se quejaron profundamente de que Pepsi hubiera elegido para su anuncio a Madonna y esa canción en particular y unieron fuerzas para conseguir vetarlo, hasta el punto de que, finalmente lo consiguieron.

El mismísimo Vaticano condenó el vídeo por “contenido blasfemo” y llamó a la comunidad católica de todo el mundo a boicotear a la artista no consumiendo ni su música ni “nada que guardara relación con ella”.

Finalmente, la marca de refrescos decidió no emitir el anuncio y rompió su relación comercial con la artista, aunque tuvieron que pagarle los 5 millones de dólares por lo que la habían contratado, según publicó el Daily Mail.

Pero Madonna no solo se llevó aquella millonada bajo el brazo, sino que aquello también le sirvió para darle visibilidad en los inicios de su carrera después de que en torno a 250 millones de personas en el mundo vieran el anuncio aquel día.

34 años después de aquello, la censura terminó para aquel controvertido anuncio, después de que volviera a ver la luz en la gala de los Video Music Awards de MTV celebrada en Nueva Jersey el 12 de septiembre de 2023.

Un momento que la propia Madonna, que no pudo estar presente en la gala, aprovechó para publicar en su cuenta de Instagram para agradecer a la marca que recuperara el anuncio: “Gracias Pepsi por finalmente darte cuenta de la genialidad de nuestra colaboración. Los artistas están aquí para alterar la paz”.

Y recordó también que “el anuncio fue inmediatamente cancelado cuando me negué a cambiar ninguna escena del vídeo en el que besaba a un santo negro o quemaba crucifijos. Así comenzó mi ilustre carrera como artista, negándome a comprometer mi integridad física”.

Con el tiempo, aquel polémico tema se convirtió en uno de los singles más vendidos, en un habitual de las listas de éxitos y su disco homónimo consiguió vender más de 15 millones de copias en todo el mundo siendo calificado por revistas como Rolling Stone como “lo más cerca que la música pop puede estar del arte”.

Hoy Madonna puede presumir orgullosa de haber vencido a sus censores de aquellos años, que solo consiguieron vetar un anuncio publicitario, mientras que veían como su carrera no paraba de subir como la espuma hasta colocarla en lo más alto, convertida en la ‘Reina del Pop’.

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